Una cocina local y viajera

Cuando Pepe Solla reflexiona sobre la evolución de su cocina, inevitablemente menciona a sus proveedores: «Son las personas que realmente, me entienden, porque me hacen llegar lo que necesito para llevar a cabo mi cocina. Nuestra relación es de absoluta confianza. Ambos buscamos productos maravillosos. Por ejemplo, Santi, de la Finca los Cuervos, me ha proporcionado unos guisantitos a los que nos ha costado otorgar el punto exacto de madurez», explica el cocinero, a quien también le inspiran los viajes, «además de otros estímulos que traes a casa y mimetizas». Ayudado por un equipo de entre 14 y 16 personas entre fogones y otras siete en la sala, de su espacio llama la atención una mesa de madera grandísima y espectacular colocada en su cocina. Esta temporada rebosa de pescado azul (jurel, sardina, caballa...), así como de bonito de Burela, que llega a la mesa marinado, jugo de tomate aliñado, kéfir y pepino.

Entre los mariscos destaca el bogavante, protagonista de un mar y montaña junto al pollo de corral, acompañados de mole. El pulpo en escabeche es otra preparación ligera, mientras que el jurel «lañado», curado en sal, con aguachile, fruta de la pasión, uvas, chalotas y flor de saúco es un ejemplo de la propuesta local y viajera, ahora también al frente de Atlántico y Casa de Petiscos.

Restaurante: Casa Solla

Dónde: Avda. de Sineiro, 7. S.Salvador de Poio. Pontevedra

Tel.: 986 872 884