Al aire libre

El verano asoma en el calendario y Sevilla busca alternativas culturales para hacer frente a las altas temperaturas y al éxodo playero

El cambio de estación ya está aquí, sólo hay que mirar a los termómetros para cerciorarse. Los 40 grados de temperatura que se esperan para los próximos meses no invitan a encerrarse entre cuatro paredes para matar el tiempo de ocio. Hay que buscar otras opciones más livianas que pasan por sacar al aire libre las programaciones cuando el sol deja de ser el enemigo. Desde hace algunos años, Sevilla se ha especializado en este tipo de citas, que además de refrescar sirven de sustento para la mermada población que se queda en la ciudad. La playa queda lejos y el asfalto achicharra, de acuerdo, pero sólo hay que buscar un poco para encontrar ese plan que te salve de una noche tórrida.

Un clásico de la programación del Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla (Cicus) es el que, bajo el epígrafe «21 grados», ofrece un amplio catálogo de opciones que tienen al cine durante las noches como plataforma central, aunque la oferta se complementa con conciertos, exposiciones, teatro y poesía. El ciclo arranca el próximo lunes y permanecerá activo en la sede de Madre de Dios hasta el 27 de agosto. En este intervalo, a las 23:00 horas comenzarán las proyecciones en el patio del edificio que en esta edición hará un guiño especial al trabajo de Orson Welles, del que se emitirán «Ciudadano Kane», «El proceso», «El tercer hombre» y «Fraude», este último, uno de los más importantes legados de lo que se conoce como el falso documental. En esta senda, el ciclo realizará un homenaje a aquellos directores europeos que cruzaron el Atlántico huyendo de los nazis y cuyas carreras cinematográficas tuvieron una segunda oportunidad en Estados Unidos. Así, «El refugio de Hollywood» recordará a Fritz Lang, Ernest Lubistch, Otto Preminguer y Douglas Sirk. La programación hasta agosto se complementa con una serie dedicada al cine independiente norteamericano y con un repaso a nuestro pasado más reciente, al recuperarse películas emblemáticas de la década de los noventa como «Caro diario», de Nani Moretti; al tiempo que también habrá espacio para los documentales. Junto a las proyecciones como tal, «21 grados» pone el acento este año en la poesía, la música rock y las exposiciones, actividades que se irán insertando progresivamente en cada una de las proyecciones antes mencionadas y que se pueden consultar yaen la página web del programa.

Muy cerca del Cicus, en los jardines de los Reales Alcázares, una nueva edición de conciertos nocturnos arrancó ayer con el cante de José Valencia, que acaba de estrenar disco en directo. Esta noche toca cambio de tercio con la actuación de «La banda morisca», un grupo dedicado a mezclar las composiciones populares clásicas del folclore español, pero tamizadas por una raíz flamenca. Canciones tradiciones andaluzas, serranas o jaleos son algunas de las piezas que interpretarán esta noche. El turno de mañana es para «Très bien!», un nuevo conjunto de la escena swing sevillana que desde hace unos años ha recuperado la fiebre por este tipo de música como si estuviéramos en el Berlín de los años 30. Tal es así, que el programa elegido para la primera de las actuaciones previstas para este ciclo rescatará las melodías más pegadizas del guitarrista Django Reinhardt.

Por su parte, si la intención es dejarse llevar por los grandes conciertos, dos son las citas importantes. Por un lado, esta noche actuará en el Auditorio Rocío Jurado la cantante Vanessa Martín, que ofrecerá las canciones de su último trabajo «Crónica de un baile»; mientras que en el Palacio de Exposición y Congresos de Sevilla (Fibes), Miguel Poveda tiene reservadas hasta el domingo las tres próximas noches para mostrar «Sonetos para la libertad», con el que canta versos de Quevedo, Rafael de León, Neruda o García Lorca.

Finalmente, para los que estén más interesados en el teatro, la compañía «La Tarasca» recupera a partir de la semana que viene la obra «El secreto de la Torre de Don Fadrique», un montaje que realizaron en el año 2000 y que quince años después vuelve a interpretar el mismo elenco que entonces. Intrigas palaciegas con una puesta en escena muy cuidada para conocer a uno de los momentos más importantes de la Edad Media de la mano del infante Don Fadrique.