C’s vuelve a negar a los niños con trastornos más recursos económicos

En la comisión de Hacienda del pasado 9 de diciembre, Ciudadanos rechazó, junto al PSOE, las enmiendas presentadas por el resto de partidos con representación parlamentaria para mejorar la dotación económica de la atención temprana en 2017. Una medida que es entendida como otra «traición» por parte de la plataforma que aglutina a los padres de los niños andaluces con trastornos en el desarrollo y que supondrá la imposibilidad de ofrecer el número de sesiones necesarias para un idóneo tratamiento a un colectivo de19.000 menores en la actualidad, pero que se calcula que podría casi duplicarse introduciendo a los menores con riesgo de padecerlos y aquellos aún hoy sin diagnosticar.

El Gobierno de Díaz plantea en su Proyecto de Ley de Presupuestos destinar 20.982.672 euros, una cifra significativamente superior a la fijada para el presente ejercicio. En concreto, 10.583.596 euros más. La formación naranja que en Andalucía lidera Juan Marín «vende» como un éxito propio este aumento, surgido como se recordará de una iniciativa directa de la presidenta de la Junta para evitar que prosperase la ley que Podemos, en nombre de la Plataforma de Atención Temprana, y con el respaldo de PP e IU, llevó al Parlamento. C’s retiró su apoyo a última hora, convencido de que las mejoras prometidas por Díaz serían inmediatas. El PSOE evitaba así que por vez primera la oposición legislase en Andalucía.

La realidad hoy es que el sistema no responde a las necesidades reales. En el propio acuerdo marco la Consejería de Salud reconoce que la media de sesiones que un menor requiere se sitúa en ocho al mes, pero las reduce a cinco «dada la disponibilidad presupuestaria existente». Esto y la promesa de acabar con las listas de espera (oficialmente más de 2.000 niños) se ha traducido en muchos casos en la reducción de las sesiones que se venían ofreciendo para dar cabida a otros niños. Por ello, tanto Izquierda Unida como Podemos plantean con sus enmiendas incrementar la cantidad en diez millones de euros y el Partido Popular que la cantidad se elevase 25 millones más para un total de 45 millones anuales, cantidad que resolvería los problemas que el sistema actual viene arrastrando, con un claro daño para un colectivo muy sensible. Supondría, entre muchas otras cosas, acabar con el «copago» de los padres, que llega a suponer un desembolso superior a 400 euros mensuales.

Mañana está previsto volver a abordar su discusión en comisión. PP, IU y Podemos pretenden mantenerlas «vivas» para que sean debatidas en el Pleno del 21 de diciembre. Las familias quieren estar presentes en el Parlamento para oír las excusas de C’s. Marín, por ahora, se limita a pedir que las familias no se dejen «engañar», no se sabe bien por quién.

La plataforma que aglutina a las familias de los menores se siente traicionada de nuevo por Ciudadanos; y recuerda que ya el año pasado el partido de Albert Rivera rechazó una enmienda similar presentada por el PP «con la excusa de que se les había pasado presentar la suya y en ésta se habían equivocado».

«Está naciendo un niño con Trastorno del Espectro Autista (TEA) cada 88 partos. Queremos que nuestros hijos y nietos lleguen a colegios, institutos y universidades. La atención temprana sólo es compatible con la palabra inmediatez», explica Antonio Guerrero, portavoz de las familias.