Educación

CSIF denunciará a los subrogados de Faffe si trabajan para Educación

Aumenta la tensión en la Junta por el traslado de competencias el 1 de enero

Ana María Corredera y Teresa Ruiz Sillero, ayer, en la sede del PP-A
Ana María Corredera y Teresa Ruiz Sillero, ayer, en la sede del PP-Alarazon

La Consejería de Educación debe asumir a partir del 1 de enero las competencias de la Formación Profesional para el Empleo que hasta ahora estaban adscritas a la Consejería de Empleo. Así lo decidió José Antonio Griñán al conformar su Gobierno tras las elecciones de marzo. El traspaso de poderes entre ambos departamentos está resultando más problemático de lo previsto. Uno de los principales problemas es qué hacer con los trabajadores de la Fundación Fondo de Formación y Empleo (Faffe), uno de los entes creados en su momento por la Junta de Andalucía y que se ha nutrido de personal contratado «a dedo».

Tras la reordenación del sector público empresarial y como consecuencia de una sentencia del TSJA que tumbó la integración de este personal en el Servicio Andaluz de Empleo, la Junta dictó una instrucción mediante la que creó una nueva categoría laboral: personal subrogado al SAE. Ahora la Consejería de Empleo quiere «endosar» estos trabajadores a Educación, que no quiere asumirlos. Fuentes consultadas por este periódico aseguran que el departamento de Mar Moreno aboga por que el cambio de competencias sólo conlleve el traslado de los funcionarios competentes y con la dotación presupuestaria correspondiente.

A esto se añade un nuevo problema. ¿Puede personal subrogado del SAE –la categoría otorgada a los trabajadores de Faffe– trabajar para otra consejería, Educación, sin que ello suponga un incumplimiento de la sentencia del TSJA que declaró nula su integración? Desde el sindicato CSIF aseguran que no es posible. Y advierten de que si llega a producirse, denunciarán este hecho ante los tribunales. Fuentes del sindicato aseguran que los empleados de la extinta Faffe no pertenecen a la Administración General de la Junta y que, por tanto, a la espera de que el Supremo aclare su situación, deben desempeñar sus funciones bajo el paraguas del SAE. Otro escenario acabaría nuevamente en los tribunales.

Mientras el pulso entre Economía y Educación se aclara, siguen moviéndose fichas en el seno de la Junta. Como informó ayer este periódico, la consejería de Antonio Ávila ha habilitado la sede de la antigua Faffe en la avenida Diego Martínez Barrio de Sevilla y ha ordenado el traslado del departamento de Formación Profesional Ocupacional. Los funcionarios denuncian que el edificio no tiene los mínimos medios técnicos.