Díaz, entre el claroscuro

Ley de Transparencia, dos años después

El Consejo de Gobierno va a dar luz verde este martes al Anteproyecto de Ley de Transparencia, que pondrá la norma rumbo al Parlamento andaluz. Hay varias cuestiones que resaltar al respecto. La primera y más llamativa es la dilación en los plazos. Esta norma emana del compromiso de transparencia anunciado por el ex presidente Griñán durante su segundo y último discurso de investidura, el 2 de mayo de 2012. El ex presidente anunció la aprobación de 28 leyes. Una de ellas, la de transparencia. Próximos al ecuador de la legislatura, este compromiso sigue inédito. Ninguna de ellas ha entrado aún en trámite parlamentario. Griñán volvió a insistir el 25 de septiembre de ese año 2012 en la comisión de investigación de los ERE. El último as que guardaba en la manga era precisamente el compromiso de que Andalucía tendría la ley de transparencia más avanzada de todas las que existieran en España. Han pasado por tanto dos años de fuerte zacudidas judiciales por los casos ERE, Invercaria o las facturas irregulares de UGT-A, y es ahora cuando el Consejo de Gobierno va a aprobrar una norma a la que aún le queda un largo recorrido parlamentario. Con suerte, entrará en vigor este periodo de sesiones, que acaba en junio. Hay más aspectos relevantes. La opacidad en la Administración que no ha cesado pese a que ya existía este compromiso de poner muros de cristal en la Junta de Andalucía. Ni se publican las cesantías, ni se publican las indeminizaciones por viviendas a altos cargos, ni las consejerías atienden los requerimientos de información cuando de asuntos espinosos se trata. Varias semanas antes de que apareciera publicada la información, estuvo este periódico preguntando a la Consejería de Medio Ambiente por un contrato de 47 millones de euros en alquiler de vehículos que ganó una empresa de Jaén muy bien relacionada con el PSOE y que no se publicó en el BOJA. El silencio y las evasivas fueron las únicas respuestas. Cuando apareció la información y el PP llevó el caso al Parlamento, la respuesta del entonces consejero Luis Planas fue que todo se debió a un error informático. Y ahí quedó la transparencia. El propio trabajo parlamentario es un ejemplo de la más absoluta opacidad del bipartito. El número de preguntas sin responder del Partido Popular ronda el millar, y muchas respuestas a preguntas escritas rozan el ridículo, cuando no el menosprecio al trabajo de la oposición.

Siguen los contactos con magnates del Ibex

La presidenta de la Junta sigue su agenda de contactos con magnates del Ibex 35 que tan poco le gustan a Izquierda Unida. Antes de finalizar el mes firmará un convenio con el presidente de Caixabank, Isidro Fainé. Será el cuarto convenio en lo que va de año con un importante representante del sector empresarial o financiero español. Este acuerdo contendrá una parte de becas para jóvenes y otra parte de apoyo al sector empresarial. Hay más reuniones en cola. Otro de los grandes empresarios con los que se reunirá pronto Susana Díaz es el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán. Ahora la incógnita se cierne también sobre cuándo se producirá la reunión de Díaz con el nuevo líder del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, que tomará oficialmente las riendas del partido el 2 de marzo.