Parlamento Regional

El PSOE se salta todas las fechas dadas para renovar la RTVA

La falta de compromiso de los socialistas respecto a los órganos de extracción parlamentaria solivianta a C’s

La presidenta de la Junta, Susana Díaz, y el líder de C’s en Andalucía, Juan Marín, en el último Pleno del periodo de sesiones
La presidenta de la Junta, Susana Díaz, y el líder de C’s en Andalucía, Juan Marín, en el último Pleno del periodo de sesioneslarazon

La falta de compromiso de los socialistas respecto a los órganos de extracción parlamentaria solivianta a C’s

En Ciudadanos no tienen ninguna duda de que el mensaje adecuado y electoralmente más productivo es el de la estabilidad. Por eso la formación que lidera Juan Marín en Andalucía volvió apoyar en diciembre, por segundo año consecutivo, los Presupuestos autonómicos para 2017. Y eso que no incluyen algunas de sus demandas económicas, como una nueva bajada de al menos el 0,5 del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que sí disminuyó dos puntos en las cuentas de 2016.

Ciudadanos hace un balance contenidamente optimista del año y medio de apoyo al Gobierno de Susana Díaz –el acuerdo de 72 medidas lo suscribieron ambas formaciones en junio de 2015–, ya que este partido, con nueve diputados, ha podido apuntarse algunos tantos como la bajada del IRPF y del impuesto de Sucesiones y Donaciones, el aumento de las partidas para los autónomos o, en materia de regeneración democrática, el apartamiento de la política de los ex presidentes Chaves y Griñán.

Quedan por salir adelante asuntos en los que Ciudadanos tiene un empeño especial como la reforma de la Ley Electoral, actualmente en manos de una mesa de trabajo que se reunió por primera vez el pasado mes de junio, o la reducción efectiva del 25 por ciento del peso de la denominada «administración paralela» de empresas públicas, agencias, consorcios y fundaciones. Sin embargo, lo que molesta especialmente a esta formación es la falta de compromiso del Partido Socialista –C’s extiende la responsabilidad también al Partido Popular– para acometer la renovación de los órganos de extracción parlamentaria. El vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, lleva desde el pasado verano dando fechas sin que se concrete ninguna propuesta concreta, lo que en Ciudadanos interpretan como una técnica para dar patadas hacia adelante al balón. La negociación no ha salido del plano informal y se dirige de momento hacia ninguna parte.

Juan Marín ha quedado en entredicho, de ahí su enfado. En una comparecencia en el Parlamento el pasado 5 de octubre para presentar las medidas de su partido a los Presupuestos, aseguró que la renovación de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA) debería estar «resuelta definitivamente» a fecha de 31 de diciembre. Marín se refirió ese día sólo a la RTVA, pero otros órganos de extracción parlamentaria como el Consejo Consultivo, el Consejo Audiovisual y el Defensor del Pueblo han cumplido su mandato o tienen a consejeros en funciones.

La fecha del 31 de diciembre fue el último ultimátum de Juan Marín, pero no el único. Hay que recordar que en pleno verano, el pasado 13 de agosto, el vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, aseguró que septiembre sería un mes «definitivo» para la reforma de la RTVA. El pronunciamiento se produjo después de que Juan Marín asegurara en julio que se le estaba acabando la paciencia y que ya era hora de que se convocara de manera oficial a la negociación a todos los partidos.

Con estos precedentes se entiende mejor la intervención de Juan Marín en la última sesión de control al Gobierno, en la que aprovechó una pregunta sobre la reforma de la Cámara de Cuentas para lanzar una invectiva general sobre la falta de compromiso sobre la reforma de los órganos de extracción parlamentaria, en los que ni Ciudadanos ni Podemos tienen representación, ya que responden a la configuración de la Cámara previa a las últimas elecciones. «Finalizará esta legislatura, señora presidenta, probablemente, y habrá grupos parlamentarios que seguiremos ninguneados por los intereses de los dos grupos mayoritarios en la Cámara: el Partido Popular y el Partido Socialista. ¿Por qué? Pues mire, porque las leyes y los reglamentos están hechos para ustedes. Están hechos a imagen y semejanza de la vieja política: la de los rojos y la de los azules. ¿Cuándo cambiará esto señora presidenta?», señaló Marín en un tono abiertamente molesto. Fue, de hecho, junto a otra intervención del 12 de mayo sobre la falta de compromiso para reducir la «administración paralela», la más crítica del líder de C’s durante la legislatura. Aunque es justo apuntar que el tono general de Marín con Susana Díaz en la Cámara autonómica no ha sido especialmente incisivo. En Ciudadanos dirigen la responsabilidad al PSOE, por ser el partido que sostiene al Gobierno y que tiene que arbitrar las negociaciones, pero también al Partido Popular, al que una reforma en los órganos de extracción parlamentaria va a conducir necesariamente a una pérdida de poder. Juan Marín, según señalan a LA RAZÓN fuentes al tanto de las negociaciones, aprovechó un acto público en Málaga en el mes de diciembre para plantearle la situación directamente al presidente del PP-A, Juanma Moreno. Pero según estas mismas fuentes tampoco obtuvo una respuesta que conduzca hacia ninguna solución.

Una de las opciones que tenía Ciudadanos para encarrilar con el PSOE la reforma de los órganos de extracción parlamentaria era meter este asunto en el paquete de la negociación de los Presupuestos, pero según señalan desde esta formación no era viable porque se trasladaría la imagen de que se condicionaba la estabilidad a una cuestión que se escapa en sentido estricto del interés general. El gran obstáculo para la reforma de estos órganos es que es necesaria una mayoría de tres quintos. Y ni C’s y PSOE suman, ni el resto de partidos puede unirse porque el PSOE, con 47 diputados, es la única fuerza con mayoría de bloqueo.