Sevilla

IU busca a los agentes sociales para su banca

Antonio Maíllo se reunió ayer con UGT (arriba, con Carmen Castilla) y Facua
Antonio Maíllo se reunió ayer con UGT (arriba, con Carmen Castilla) y Facualarazon

La futura «banca pública», oficialmente «Instituto Andaluz de Crédito», fue el último caballo de batalla de IU en el Gobierno andaluz, antes de que Susana Díaz rompiera el pacto y convocara elecciones anticipadas. Es también el principal leitmotiv en la oposición del partido que coordina Antonio Maíllo. De ahí la ronda de contactos con los agentes sociales –ayer, UGT y Facua; hoy, Cepes– para la defensa de un proyecto auspiciado por la coalición de izquierdas, que presentará una Proposición de Ley en el Parlamento andaluz.

El coordinador de IU en Andalucía destacó la sintonía con UGT «ante la necesidad de crear una Banca Pública andaluza para cambiar la inercia de cierre de empresas por falta de crédito para poder funcionar» y que, como subrayó Carmen Castilla, secretaria de UGT en Andalucía, «las familias y los proyectos empresariales familiares puedan tener acceso al crédito». Maíllo aseguró que se siente «muy respaldado ante el apoyo de UGT y de organizaciones del tejido social como Facua a la Proposición de Ley de Banca Pública». Maíllo señaló que, mañana, durante el debate de la Proposición de Ley en el Parlamento, «IU será el portavoz del tejido social y sindical andaluz que pide agua para los que tienen sed en nuestra economía, que son quienes crean empleo», que en el sector privado andaluz, apuntó, «es en un 95% empresas de menos de 50 trabajadores, cooperativas y otras entidades de la economía social y el tercer sector». Maíllo destacó también que los autónomos «necesitan una Administración que satisfaga su necesidad de crédito» y que «el cambio de modelo productivo en Andalucía tiene que tener credibilidad con una entidad que lo financie». Por su parte, Carmen Castilla mostró su desacuerdo con las «políticas de austeridad» que «precarizan el empleo» y defendió la «banca pública andaluza» para «apoyar un cambio de modelo productivo». Por su parte, Facua coincidió en la necesidad de una «banca pública para Andalucía» que, en palabras de Antonio Maíllo, «haga saber a la economía privada que tiene un instrumento que les da crédito sin las condiciones leoninas de la banca privada» y que, subrayó Rubén Sánchez, portavoz de Facua, sea «ética, libre de fraudes y de abusos».

Maíllo agradeció a Facua su apoyo a un texto «que se hace eco del tejido social y productivo» y que podría ser, si es aprobado su trámite en el Parlamento mañana, «el inicio de un magnífico camino para dar credibilidad para salir de otra forma de la crisis». Sánchez mostró su «preocupación» por «la presión que puedan estar haciendo los grandes poderes financieros para que partidos se posicionen en contra de esta ‘banca pública’». IU, anunció Maíllo, continuará la ronda de consultas con sindicatos, agentes de la economía social y otros grupos parlamentarios para recabar apoyos.