IU rechaza el dictamen de los ERE pero suaviza sus reproches al PSOE

IULV-CA se mueve en el equilibrismo político desde que decidió entrar en el Gobierno andaluz. Y ahí va a continuar, pese a que un sector dentro del partido reclama que la coalición deje el Ejecutivo para no ser partícipes de la gestión socialista. La comisión de los ERE es el último episodio de esta tensa relación. El partido que lidera Diego Valderas decidió ayer votar en contra del dictamen final «bastardeado» y «mutilado».

A IU se le ha planteado una tesitura difícil, ya que siempre ha hecho bandera de la transparencia y de la lucha contra la corrupción. Ahora se sentará en San Telmo con un partido que asegura que el «mayor fraude de la historia de España» -en palabras del ex interventor general de la Junta- lo cometió en exclusiva el ex director general de Trabajo Francisco Javier Guerrero. No habrá problemas para la coalición, según aseguró ayer Valderas. El argumento es que la comisión de investigación no forma parte del acuerdo para gobernar en Andalucía que sellaron PSOE e IU después de las elecciones. Por tanto, la actitud socialista no es impedimento para romper el pacto ni afectará a la confianza en el socio.

Valderas se esforzó ayer en responsabilizar al PP del fracaso de los trabajos parlamentarios. Casi en exclusiva. «Es el que mutila el informe», dijo. Costó mucho sacarle al vicepresidente de la Junta alguna palabra de reproche contra el PSOE, más allá del «tacticismo» para no ver perjudicados sus intereses. Llegó a decir que los socialistas tenían sus conclusiones previamente elaboradas al comienzo de los trabajos. Pero no tenían margen: «Lo que podía hacer el PSOE estaba casi cantado», justificó.

Valderas llamó al PP «kamikaze» por señalar que la responsabilidad política del fraude alcanzaba a Chaves y Griñán. Ese nivel no lo iba a alcanzar nunca la coalición de izquierdas porque significaba dinamitar el pacto. Pese a que antes de las elecciones, Valderas sí responsabilizó a la actual consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, por archivar sin leer los informes del interventor general que alertaban del proceso irregular de concesión de ayudas. Ahora, ya no es así. «El informe ha alcanzado el nivel de lo demostrado», justificó. También señaló la responsabilidad de Griñán «por acción u omisión».

El presidente de la comisión, Ignacio García, leerá mañana el documento final aprobado en comisión. Será rechazado con los votos de IU y PP. El fracaso de esta comisión cerrará, previsiblemente, la constitución de otras, como la de Invercaria.