Junta y Gobierno se afanan en «calzar» un déficit que no cuadra

El Ejecutivo autonómico guarda como uno de sus mejores secretos la cifra de déficit de 2012. Es una incógnita si Andalucía se ha ajustado o no al 1,5 por ciento pactado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Sin embargo, otras comunidades como Madrid, Castilla-La Mancha o Extremadura han despejado dudas aclarando que cumplirán. Prevén haber cerrado el ejercicio con el 1,13, el 1,48 y el 0,97 por ciento, respectivamente.

El mensaje oficial de Andalucía es que no quiere precipitarse y contribuir al espectáculo. Así lo aseguró la consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, en sus dos últimas comparecencias parlamentarias: el día 13, en el Pleno de la Cámara y el pasado jueves, en comisión. El año pasado la Comunidad de Madrid tuvo que rectificar sus números sobre la marcha al aflorar mil millones de euros a posteriori. El déficit pasó del 1,13 por ciento al 2,21, cuando el tope era el 1,3 por ciento. Algo parecido le ocurrió a Castilla y León.

Andalucía es una de las comunidades que más difícil tiene cumplir, junto a la Comunidad Valenciana, Baleares y Cataluña, que ha anunciado que pisará más allá de la raya. Augura rondar el 1,8 por ciento, de ahí el secretismo en el que la Consejería de Hacienda envuelve el déficit. Si el Gobierno andaluz conociera de forma fiable que ha cumplido, lo anunciaría también. Necesita mensajes optimistas que lanzar a unos mercados cerrados a cal y canto. La Junta no esconde su maltrecha situación financiera. Acaba de arrancar el año, pero ya le falta el circulante del crédito. Por eso ha pedido al Gobierno central más de 7.000 millones del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) para 2013, aunque el Ministerio de Hacienda sólo le concede 3.209. Un ejemplo de esta dificultad para financiarse es el resultado de la primera subasta de pagarés del año. La consejera de Hacienda se mostró satisfecha el pasado jueves con su resultado, pero todos los plazos a más de seis meses quedaron desiertos y el coste es muy elevado. Mientras en enero el Gobierno colocó letras del tesoro a tres meses a un interés del 0,46 por ciento, la Junta pagó por ese mismo plazo seis veces más: un 3,13 por ciento. No hay que perder de vista que Andalucía recoge en su Presupuesto unas necesidades financieras de 4.840 millones de euros.

La Junta cree que es el Ministerio de Hacienda la voz cualificada para dar el resultado de déficit definitivo y contrastado de todas las comunidades y, por tanto, al Ministerio se remiten. El departamento de Martínez Aguayo está trasladando toda la documentación a la Intervención General del Estado, que tras efectuar el preceptivo chequeo contable de las regiones enviará los datos a Eurostat.

El PP da por hecho que la cifra final de la Junta estará más cerca del dos por ciento que del 1,5. Fuentes conocedoras del proceso aseguran a este periódico que el trámite se está alargando precisamente porque Consejería y Ministerio de Hacienda están llevando a cabo un intenso trabajo para intentar cuadrar las cifras que en principio no cuadran, saltan por encima del listón marcado. España está bajo la lupa de Europa y después de que Bruselas evitara concretar el viernes un aplazamiento de los tiempos para el cumplimiento de déficit al no estar claro el alcance final de las reformas, lo que menos le conviene a España es presentar un mapa de regiones incumplidoras. Menos aún, que sea Andalucía, con un Producto Interior Bruto superior a los 140.000 millones de euros.

Poco, en cualquier caso, le queda al suspense. Fuentes del Ministerio de Hacienda aseguraron a este periódico que la cifra será pública esta semana o, como mucho, la siguiente. El 10 de marzo es la fecha tope. El cumplimiento o no del déficit tampoco es un asunto menor para Andalucía. Por cada décima de desviación tendrá que ajustar 140 millones de euros. El incumplimiento de 2011–el objetivo era el 1,3 por ciento y la comunidad cerró en el 3,22 por ciento– fue la causa principal de que el bipartito PSOE-IU tuviera que aprobar un severo plan de ajuste de 2.500 millones de euros.

La información del cumplimiento del déficit fluirá de forma más constante. Hasta ahora el Ministerio daba datos trimestrales de las comunidades, pero el propósito del Gobierno es ofrecer un seguimiento mensual a partir de marzo.