La reforma del impuesto de Sucesiones de Díaz reduce la recaudación un 20%

El Gobierno saliente cifra en 100 millones el impacto. El cambio de PP y CS aumenta a 300 millones la rebaja

La recaudación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones hasta octubre del pasado año (último dato publicado por la Consejería de Hacienda), con diez meses de aplicación de la rebaja impuesta por Cs al Gobierno de Susana Díaz, se redujo en cerca de un 20% –17,48%– en relación al año previo, pasando de algo más de 289 millones en 2017 a 238,5 millones esto es, 50,5 millones. La previsión, no obstante, del Gobierno saliente es que el impacto final sea de 100 millones. En el pasado mes de octubre, la recaudación mensual fue de casi 25 millones, un 3,66% más que los 24,1 millones recaudados en octubre de 2017. En el global, según las estadísticas de la Junta, la recaudación general ha subido un 3,62%: de 12.366,7 millones a 12.783,3 millones, sólo con los impuestos. Sumando otros ingresos de derecho público, se eleva a 13.405 millones, un 5,79% más que el año previo.

La tendencia de eliminar una tasa contra la que el PP y otros colectivos recogieron millones de firmas se inició con el PSOE la pasada legislatura debido a las condiciones impuestas por Cs para apoyar la investidura de Susana Díaz y todo ello a pesar del rechazo de la entonces consejera de Hacienda y ahora ministra del ramo María Jesús Montero, que considera en su ideario ideológico que este impuesto grava a los ricos. Los trámites iniciados en el primer Consejo de Gobierno de Juanma Moreno para la bonificación del impuesto al 99% han dado pie a la artillería política de la oposición. «Sin unos presupuestos propios no se puede materializar nada», señaló el PSOE en relación a la primera medida económica anunciada por el Gobierno de coalición PP-Cs, al que acusó de pretender que «los ricos de Andalucía» sean «más ricos». Según el PSOE, «este Gobierno del cambio a peor ha optado como primera medida la de suprimir un impuesto que sólo pagan los millonarios, los que reciben una herencia, por persona, a partir de un millón de euros». Según la portavoz de la Ejecutiva socialista, Ángeles Férriz, con esta medida la Junta dejará de ingresar 300 millones anuales. Por su parte, la secretaria general del PP-A, lamentó que el PSOE «insulta» a los andaluces con sus críticas a la bonificación de la tasa. «Los que han estado 40 años metiendo la mano en el bolsillo a los andaluces creen ahora que si un padre ayuda con sus ahorros a un hijo que está en paro y no puede pagar el alquiler es porque son ricos», dijo. La eliminación del impuesto, indicó, es «de justicia social». López puso un ejemplo: si unos padres quieren dar 10.000 euros a su hijo, con Susana Díaz al frente del Ejecutivo, «782 euros se los quedaba el Gobierno socialista y ahora sólo tendrá que pagar siete euros».

Según el documento de traspaso de poderes, «el cierre del Presupuesto de Andalucía para 2018 apunta a unas cuentas solventes, marcadas por el cumplimiento de las reglas fiscales tales como el objetivo de déficit, de deuda y el periodo de pago medio a proveedores». En el caso de los ingresos, la estimación en octubre de 2017 se fijó en 25.717 millones de euros. El cálculo provisional es que este capítulo se cierre en 24.988,7 millones, lo que supone 729 millones menos (2,8%) respecto a la previsión inicial. Esta desviación se explica «por el comportamiento de la financiación proveniente de los Fondos Europeos y las transferencias finalistas de la Administración General del Estado». El Gobierno saliente señaló que en materia de tributos gestionados por la comunidad, la recaudación mejorará en 77 millones en relación con la estimación inicial (5,3% más), como consecuencia de la reactivación del mercado inmobiliario y su efecto en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados. «El impacto de la reforma del Impuesto de Sucesiones y Donaciones será finalmente de 100 millones», señaló el documento de Jiménez Barrios.

Según las estadísticas de Hacienda, consultadas por LA RAZÓN, el total de los impuestos directos cayó un 1%, de 4.225 millones en octubre de 2017 a 4.179 millones el mismo mes del pasado año. Esta bajada se explica en la caída del impuesto de Sucesiones pero también en la reducción de un 10,18% de lo recaudado con el IRPF, que también formaba parte del acuerdo con Cs. En este concepto se pasó de recaudar 81,3 millones a algo más de 73 millones. El impuesto sobre los depósitos bancarios –de tinte electoralista y sin aplicación desde hace meses– siguió con su paulatina desaparición de facto, con una caída acumulada del 99,98% en el año y del 100% en octubre. En todo el ejercicio, la Junta recaudó 4.379 euros en este concepto por los 26,8 millones de 2017. Por su parte, la recaudación por la tarifa autonómica del IRPF subió un 1,04%, pasando de 3.828,3 millones a 3.868,3 millones. Cayeron los impuestos directos pero subieron los ingresos por impuestos indirectos, en concreto, un 6,17%. Destaca el crecimiento de un 19,11% de los impuestos patrimoniales (921,1 millones recaudados); del 23,73% de Actos Jurídicos Documentados (362,7 millones); del 26,35% de las actividades de juego no presenciales (18 millones); y del 26,29% del impuesto sobre determinados medios de transporte (54,8 millones). El grueso de la recaudación proviene del IVA, con una subida del 4,71% en lo recaudado y que supone 4.949,4 millones. La recaudación de los impuestos ecológicos cayó un 9,13%: de 5,3 millones a 4,8 millones de euros.