Más de 20.000 personas en el San Fermín de Morante en La Puebla

Los Encierros de San Sebastián duplican la población de la localidad hispalense en su tercer año

El futbolista Joaquín Sánchez, cogiendo el testigo de Andrés Calamaro, con algo de retraso debido a la congestión de tráfico por la expectación, a las 12:15, dio el «cohetazo» de salida, acompañado en el balcón del antiguo Ayuntamiento de La Puebla del Río (Sevilla) por el torero José Antonio Morante de La Puebla, precursor de la fiesta taurina cigarrera. A pocos metros, el patrón San Sebastián presidía el acontecimiento que se repite por tercer año consecutivo, consagrándose como una de las fiestas taurinas de la región. Como en los encierros pamploneses, en La Puebla del Río también se invoca al patrón para pedir su protección antes de la carrera, pero aquí es San Sebastián quien en su paso de procesionar divisa casi la totalidad del recorrido desde un lugar privilegiado.

Joaquín Sánchez no defraudó. Tiró de arte y gracia y emulando al Manuel Ruiz de Lopera de sus mejores temporadas anunció: «¡Estábamos en la UVI! ¡Nadie daba un duro por nosotros, os entrego un Betis libre!».

Según fuentes municipales, más de 20.000 personas –muchos con pañuelos rojos y azules, los colores del escudo del pueblo– abarrotaron las calles de La Puebla del Río desde tempranas horas de la mañana de ayer, en ambiente festivo completado con charangas, cánticos espontáneos, la Banda de Música Municipal y la Banda Infantil de Tambores.

A las 12:30 arrancaron los erales de Zalduendo desde un extremo de la calle Larga, vía que vertebra el centro de la población, protagonizando un encierro limpio, de unos seis minutos de duración, donde se vivieron escenas emocionantes no exentas de peligro. La carrera desembocó en una plaza portátil, donde a su culminación, se toreó una vaquilla.

A las 16:00, los seis novillos protagonistas del encierro fueron estoqueados por Rodrigo Pipío, El Lauri, Jesús Cuesta y Álvaro Romero en una corrida sin picadores.

Las fiestas patronales de La Puebla, aunque aúnan un enfoque taurino, tienen otras vertientes. Al medio día, paelleros valencianos acudieron a la población que más arroz produce de Europa para cocinar una paella para 2.000 personas. La primera parte de los Encierros de San Sebastián se celebraron en la tarde del viernes con los encierros infantiles en los que cientos de niños corrieron ante más de media docena de carretones, manejados por algunos miembros de la cuadrilla de Morante. Posteriormente, el diestro realizó unas clases magistrales de toreo de salón.

La jornada festiva en La Puebla provoca que por tercer año consecutivo se duplique su población por un día –de 12.000 a más de 20.000– gracias a un evento taurino organizado por el torero Morante de La Puebla y el Ayuntamiento. El evento recupera las fechas de las tradicionales fiestas de San Sebastián, en torno al 21 de enero, para encuadrar el programa lúdico que en 2016 tuvo que ser retrasado al estar Morante de la Puebla en la temporada americana.