Se complica el Málaga en La Coruña

Hay que encomendarse al milagro de La Rosaleda. Pese a una primera mitad casi perfecta, tras la que iba en ventaja, el Málaga encajó tres goles en la segunda mitad y se ha complicado sobremanera su semifinal por el ascenso.

En Javier Ontiveros tiene el Málaga un tesoro. El extremo marbellí marcó con su electricidad la primera parte en Riazor. Primero, con una asistencia con la zurda. Tras desbordar a su par, puso un centro en la cabeza de Luis Hernández que el central convirtió con un remate picado. Empató enseguida el cuadro local de penalti, mediante Carlos Fernández tras una falta ingenua de Ricca, pero al descanso mandaban los costasoleños porque Ontiveros clavó un derechazo en la escuadra. Si no se consuma el ascenso, volará hacia un destino mejor.

Salió mejor el Deportivo del camerino y se encontró pronto con una merecida igualada, anotada por Pedro Sánchez al fusilar a Munir un centro raso de Fede Cartabia. Ontiveros quiso volver a replicar pero su falta lateral, con el portero batido, se estrelló en la cruceta. Cartabia volvió a golpear, esta vez con un excepcional toque picado que cabeceó Carlos Fernández en boca de gol para poner a los suyos por delante por primera vez.

La noche se torció definitivamente para el Málaga con el cuarto gol gallego, anotado por Borja Valle con un tiro raso ante el que Munir debió hacer más. Se le coló el balón bajo el cuerpo y se certificó un resultado que pone las cosas muy difíciles de cara a la vuelta del sábado.