«Sea cual sea el escenario, todo lo tenemos previsto»

Zoido augura un «cambio de ciclo» para «dejar atrás la corrupción»

El anuncio del presidente de la Junta, José Antonio Griñán, de no presentarse a los comicios autonómicos y el previsible adelanto electoral está marcando la agenda política en Andalucía. Tanto PSOE, inmerso en el proceso de primarias, como el PP preparan sus estrategias ante un hipotético cambio en la vida institucional de la región. El Comité Ejecutivo del PP-A, celebrado ayer en Sevilla, estuvo marcado por los movimientos que están realizando los socialistas en clave interna, por lo que el presidente de la formación, Juan Ignacio Zoido, aseguró que «sea cual sea el escenario, todo está previsto por parte del PP».

Así lo señaló sin entrar en detalles, por lo que la reacción de los populares ante cualquier eventualidad continúa sin hacerse pública. En el marco del Comité Ejecutivo, el secretario general, José Luis Sanz, marcó la estrategia, que fue escuchada por la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, entre otros dirigentes y alcaldes populares.

Zoido, por su parte, criticó que Andalucía «está sumida en el desgobierno más absoluto», puesto que «un segundo presidente ha dado una 'espantá', tiene a una presidenta nombrada con el dedo y un vicepresidente se quiere meter en todas las consejerías», calificando a este último como «vicepresidente transversal».

Por ello, subrayó que «estamos en un momento histórico» y auguró un «cambio de ciclo» de la mano de los populares, ya que «los ciudadanos son conscientes de que hay que pasar de la corrupción y el paro a la creación de empleo y la honestidad».

Sobre el caso de los ERE fraudulentos, el presidente del PP andaluz señaló insistentemente que fue su formación la que denunció el fraude a través del delito societario de Mercasevilla «y no el PSOE, como nos quieren hacer ver» e instó a Griñán a «dar las oportunas explicaciones y no esconderse, que es lo que ha hecho últimamente para eludir su responsabilidad».

En cuanto al último auto de la juez Alaya, en el que imputa a una veintena de personas, criticó que «cuando a los socialistas no les gusta un auto, arremeten contra la magistrada».