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Andalucía

«Sprint» final con mirada hacia el Sur

Casado quiere repetir la «vía andaluza» y Díaz confía en lograr medio millón de votos más que el 2D

Juanma Moreno y Pablo Casado, en un acto electoral en Sevilla / Foto: Manuel Olmedo
Juanma Moreno y Pablo Casado, en un acto electoral en Sevilla / Foto: Manuel Olmedolarazon

Casado quiere repetir la «vía andaluza» y Díaz confía en lograr medio millón de votos más que el 2D

A escasas horas del fin de la campaña electoral, los partidos aprietan el acelerador y lo hacen con la mirada puesta en Andalucía, un granero de votos decisivo para que la balanza, y el panorama posterior de pactos, se decante hacia una opción u otra. El líder del PP, Pablo Casado, defendió ayer en Sevilla la «vía andaluza» como modelo exportable a nivel nacional, además de reclamar a los suyos un «último esfuerzo» para llegar a la Moncloa. «La punta del compás del cambio, el epicentro de la ilusión y el ansia de mejorar España tiene una referencia, que es lo que conseguimos y lo que conseguiste Juanma en diciembre. Lo que hiciste en Andalucía, recuperar la dignidad, la prosperidad, el empleo, la transparencia, los servicios públicos, lo vamos a hacer en España», aseguró.

Tras señalar una vez más que quiere ser el presidente de «todos los españoles», remarcó que el PP abre los brazos a todos los que quieran mejorar España «sin reabrir viejas heridas, sino conquistando nuevos anhelos». Con ese objetivo, apeló al «voto unido» en torno al PP para sacar a Sánchez de la Moncloa. «Si se quiere subir una escalera no parece lógico quitarle dos de cada tres peldaños ni partirla en tres», exclamó.

En este punto, el líder popular subrayó que el PP «es el único que es capaz de llegar a acuerdos con otros partidos a izquierda y a derecha siempre que se respete el programa electoral del PP y la Constitución», por lo que no acarrearía ningún bloqueo. También afirmó que si el PP logra gobernar se evitaría un Gobierno de Pedro Sánchez con Podemos, los independentistas y batasunos. «Sánchez es como una muñeca rusa, que oculta a Junqueras y Jordi Sánchez que le ofrecieron su apoyo a cambio de indultos y el referéndum de autodeterminación, y a Iglesias y Otegi», dijo, un argumento que ya empleó en el debate de Atresmedia.

En este sentido, explicó que en el último debate en televisión ya le dijo a Sánchez que tuviera cuidado con Otegi porque «si le apoya le va a pedir un rescate» y se preguntó «qué podrá ceder Sánchez si Otegi resulta clave para su investidura». Frente a ello, el líder popular reivindicó «la memoria, la dignidad y la justicia de las víctimas del terrorismo».

Por su parte, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, presumió de la gestión de su gobierno de coalición con Cs ante «el miedo» que cree que quiere infundir el PSOE y «toda la izquierda» tras el cambio que se produjo el 2D: «Lo que ha pasado es que en Andalucía hemos vuelto a la normalidad».

En el PSOE, la líder andaluza, Susana Díaz, quiso dejar claro que «nos vamos a batir el cobre en estas 96 horas que quedan». Tras comentar que su formación ha organizado doscientos actos durante la Semana Santa, la secretaria general de los socialistas andaluces se mostró convencida de que «vamos a tener un gran resultado. «Espero que la movilización sea alta. Si la participación es elevada aspiramos a estar en una horquilla del millón y medio de votantes en nuestra tierra», auguró, muy optimista, durante un acto con periodistas celebrado en la sede regional de San Vicente. «Estoy convencida de que vamos a sacar un grandísimo resultado. Los socialistas andaluces somos los que más vamos a aportar a la victoria del PSOE en España». Sobre su percepción en la calle, detalló que «hay mucha gente que en estos cien días se ha arrepentido de no haber ido a votar, al final nos vamos a quitar la espinita que tenemos clavada del día 2 de diciembre».

Díaz había convocado a los medios de comunicación para ofrecer su versión del balance de los cien días de gobierno. Sus dardos contra PP y Cs fueron continuos, definiendo el Ejecutivo como un «Gobierno frágil» y llegando a calificar a sus integrantes como «vagos e incapaces». Empeñada en desmontar los logros desgranados el día anterior por el presidente y el vicepresidente andaluces, criticó su «incapacidad porque después de cien días resulta que solo han aprobado una cosa: bajar los impuestos a los 300 más ricos de Andalucía». «Nos suben a casi todos las guarderías, nos anuncian que no tendrán recursos para cumplir sus compromisos electorales y ya nadie se acuerda de los 600.000 empleos que prometieron», recordó.

Sobre los continuos ataques lanzados contra ella por la Junta debido a la «herencia recibida», invitó a los actuales responsables a que «se vayan a los juzgados» si realmente «cuestionan» la honorabilidad del anterior Gobierno. «No sería tan mal plantel de dirigentes cuando muchos de ellos se han quedado en sus puestos de responsabilidad», recordó.

Del mismo modo, Díaz lamentó que la Junta haya realizado ese balance cuando los cien primeros días no se habían cumplido. «Han querido hacer un acto de propaganda en medio de la campaña electoral, pese a que se cumplen el 2 de mayo», remarcó. Su visión es que han sido «cien días de mentiras». «Primero fueron las listas de espera sanitaria y luego las de la dependencia».

Vox avisa: «A ver si renuevan otros cien días»

El portavoz de Vox en el Parlamento , Alejandro Hernández, advirtió ayer al Ejecutivo que «a partir de ahora ya no hay un plazo de cortesía» y que sus exigencias van a ser «firmes y severas». Al día siguiente de que PP y Cs hicieran balance de sus primeros cien días al frente de la Junta, avisó: «A ver si renuevan otros cien días». El mismo día en que su líder, Santiago Abascal, hizo una demostración de fuerza al llenar el Palacio de Congresos de Sevilla. Según Hernández «están faltando tanto a la letra como al espíritu» del pacto suscrito con el PP con 37 medidas que «no dejan de ser pactadas con el Gobierno» (Cs se desmarca).