Susana Díaz rebaja a «fricciones ínfimas» el «proceso ejemplar» de las listas

El PSOE-A se aferra a su posición de fuerza ante Ferraz. La militancia, defiende, ha elegido sus listas y ha hecho concesiones al federal con la aceptación, en algunos casos, de los ministros en los primeros puestos, aunque a regañadientes. Díaz habla de «un proceso ejemplar» con «fricciones ínfimas». En el Comité Director, nadie pidió la palabra. El frente interno resta a los socialistas brío en la oposición, coincidiendo con un hipotético período de gracia para el que llaman «Gobierno del cambiazo». Susana Díaz denunció «una estrategia para destruir la credibilidad y los servicios públicos» a raíz de los mensajes hechos públicos por el médico Jesús Candel, líder de las protestas sanitarias, conocido como Spiriman, con el ahora presidente de la Junta, Juanma Moreno, al estilo del «Luis, sé fuerte», ironizó Díaz. El mensaje del PSOE-A es que el nuevo Gobierno ha llegado «para hacer negocio».

La secretaria general del PSOE andaluz denunció las «mentiras, difamación y montaje» que están llevando a cabo las derechas en Andalucía para «hacer negocio con la sanidad, la educación y la atención a los personas con dependencia», que son los servicios a los que se dedica la mayor parte del presupuesto de la comunidad. Díaz expresó su deseo de que «España tome nota de lo que ha pasado en Andalucía» e hizo un especial llamamiento a la movilización en las elecciones generales y municipales, porque «si te quedas en casa, ellos vienen, sin ningún pudor, sin ningún complejo, sin nada que les frene para conseguir una sociedad más desigual e injusta». Durante la reunión del Comité Director, en la que se aprobaron por unanimidad las candidaturas para las elecciones locales en municipios de 20.000 a 50.000 habitantes, Díaz señaló que solo han hecho falta dos meses para que se descubra que «no va a crear 600.000 empleos, que no van a bajar los impuestos sino hacerle regalos fiscales a los más ricos».