Al rector de Burgos no le gustan los recortes pero dice que el que se empeña se matricula

El rector de la Universidad de Burgos asegura que no le gustan nada los recortes que se están teniendo que acometer en materia educativa y universitaria para hacer frente a la crisis por la que atraviesa el país. Y menos aún que hayan tenido que subir las tasas universitarias, que han colocado a nuestras universidades, entre las más caras de España.

Pero, sin embargo, Alfonso Murillo asegura que no le consta que algún alumno haya tenido que dejar de estudiar porque no puede pagarse la matrícula. Al respecto, explica, en declaraciones recogidas por la Agencia Efe, que los alumnos tienen a su alcance una serie de ayudas por parte de la Junta, el Gobierno y las propias universidades para evitar que tengan que dejar de estudiar, como poder pagar la matrícula de forma fraccionada, e incluso, y como es el caso de su universidad, en Burgos, existen ayudas de emergencia a las que, por ejemplo, el pasado año se acogieron catorce alumnos. Y es que el rector de la Universidad Burgalesa está convencido de que el que se empeña en estudiar se matricula a toda costa. Asimismo, no se muerde la lengua a la hora de reconocer que no le gusta nada de nada la reducción de los fondos existentes para poder ayudar a los estudiantes, y defiende a capa y espada que se concedan becas a todos los que aprueben, aunque sea con un cinco. En este sentido, y ante la polémica surgida porque la Ley Wert exige al menos un cinco y medio para poder optar a esa ayuda, el rector de la Universidad de Burgos tiene claro que un cinco y medio no debería ser demasiado para un universitario, «ya que éste debe ser un profesional del estudio». Si bien, Alfonso Murillo es también partidario de exigir mucho más a un alumno que está recibiendo una beca para poder seguir optando a ella, ya que en su opinión la sociedad le está ayudando de forma especial y confiando en él.

Menos alumnos

Respecto a la situación de la Universidad de Burgos, el rector se muestra optimista de cara al futuro, y aunque reconoce que este año han registrado una reducción de doscientos alumnos, destaca el incremento que han experimentado de estudiantes de nuevo ingreso. Asimismo, Murillo tampoco considera que la supresión que ha habido de titulaciones en esta institución debido al escaso número de matrículas que ha planteado la Consejería de Educación les vaya a afectar. Y pone como ejemplo lo que ocurriera hace unos años con la supresión de la rama de Transportes y Servicios de la Ingeniería de Obras Públicas, en la que los alumnos que la cursan están a punto de acabar.