Apoyo unánime a Javier Lacalle y rechazo a los que tiran la piedra y esconden la mano

Apoyo unánime y generalizado de la Junta y ayuntamientos de Castilla y León a la figura del alcalde de Burgos, Javier Lacalle, ante la toma de decisión de paralizar las obras en el barrio de Gamonal y dialogar con los vecinos en busca de la mejor solución. El portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, refrendaba este respaldo, advirtiendo además que el proyecto, antes de ejecutarse había sido «participado» y «dialogado» con la sociedad y la asociaciones de vecinos y rechazó los actos de violencia acaecidos en las últimas horas en la capital burgalesa. «El peor enemigo de la democracia y la libertad es la violencia y el caos», aseveró, a lo que añadió que «dialogar no es ceder ni dar un paso atrás».

El consejero-portavoz también mostró el «máximo respeto» a las movilizaciones y ciudadanos, y reflexionó que actuaciones de esta índole pueden estar motivadas por seis años de una crisis muy prolongada y por el «rechazo profundo a la clase política», para aclarar a continuación que «no estoy justificando la violencia».

De Santiago-Juárez negó que hubiera existido un toque por parte de Génova para la paralización de las obras, sino que la decisión ha sido tomada por el equipo de Gobierno municipal y tachó al alcalde de Segovia, el socialista Pedro Arahuetes, de «impresentable» e «irresponsable» por sus comentarios en las redes sociales incitando a la ciudadanía segoviana a rebelarse contra el Palacio de Congresos que la Junta va a construir en la capital segoviana.

El alcalde de Ávila, Miguel Ángel García Nieto se quiso solidarizar con el alcalde burgalés y consideró «muy acertada» la decisión de paralizar las obras hasta llegar al consenso.

Mientras, Javier Lacalle confirmaba que se va a analizar con la plataforma vecinal y los grupos políticos los detalles de las obras del bulevar del barrio de Gamonal para ver en qué aspectos se coincide y en cuáles se discrepa y si esos «elementos más divergentes se pueden plantear en otro momento».

Durante una entrevista en el programa Espejo Publico de Antena 3, Lacalle insistía en que se han dado unos días, para ver en qué aspectos de la mejora se coincide y cuáles son los más divergentes, aunque en este nuevo proceso de diálogo «no se han marcado líneas rojas».

Lacalle rechazó que para la toma de esta decisión haya habido presiones de su partido y afirmó que no se trata de «una rendición o claudicación», aunque declaró que el citado bulevar es una «obra buena que beneficia la calidad de vida de los vecinos», argumentó.

El Grupo Popular tratará de consensuar hoy, durante un pleno municipal, una declaración de condena hacia los incidentes violentos de los últimos días y la necesidad de diálogo y respeto de la convivencia.

Por su parte, el PSOE ha presentado una moción de urgencia para debatir en la que se pide que se declaren las obras del bulevar de Gamonal y el aparamiento en la calle Vitoria como «definitivamente paralizadas». reclaman que se abandone definitivamente el proyecto.