Apuestan por la psicología en pro de la terapia psiquiátrica

Hay otra manera de tratar con los enfermos mentales graves, más efectiva y personal. Con ella trabajan en el Centro de Intervención Comunitaria (CIC) del Hospital Río Hortega que cumple cinco años. El consejero de Sanidad, Antonio Sáez Aguado, visitó las instalaciones con motivo de esta celebración y anunció el traslado de este recurso a La Victoria.

«Se trata de que la persona lidere su proyecto, que no se quede atrapado en un diagnóstico psiquiátrico», sostuvo la coordinadora del centro, Laura Martín, quien explicó que la diferencia con otros modelos es que «se centran en lo que necesita el paciente, en sus miedos y necesidades, en verlo en su globalidad y totalidad, y no tanto en el diagnóstico y tratamiento».

Reducir los ingresos

Son las singularidades de este modelo las que han permitido reducir las estancias hospitalarias de personas diagnosticadas de trastorno mental grave.

Así lo aseguró Sáez Aguado, que destacó que esta iniciativa, que proporciona espacios de libertad para el enfermo y apuesta por centrarse en las necesidades del paciente y su familia, ha permitido prescindir de la Unidad de Rehabilitación del centro concertado Doctor Villacián y situar el pasado enero como el mes con menor ocupación de la Unidad de Agudos del Hospital de los últimos tres años.

Asimismo, apostó por «exportar» estos proyectos a otras provincias para reducir las estancias hospitalarias de estas personas, aunque reconoció que la implantación de este tipo de centros en otros hospitales dependerá de la «iniciativa» y la «orientación» de los profesionales de Psiquiatría que trabajen en ellos.

También quiso destacar el consejero el proyecto piloto del centro de salud Delicias I de Valladolid, con atención psicológica en menos de 48 horas, que busca prevenir el consumo innecesario de psicofármacos, y que se ampliará próximamente a los Centros de Salud de Zaratán, Tordesillas y Covaresa, en la capital.

Además, Antonio Sáez Aguado anunció durante su visita al CIC que la Gerencia Regional de Salud (Sacyl) realizará a lo largo de este año un inversión de 700.000 euros para adecuar unas dependencias de un centro del barrio de La Victoria para que pueda acoger esta dotación que, a su juicio, debe estar en un entorno más cercano a la sociedad y no tanto hospitalario.

Por este Centro pasan cada año unas 55 personas de las dos áreas de Valladolid.

Sáez Aguado destacó que este tipo de recursos representa un cambio, tanto en la organización de la atención psiquiátrica para atender la salud mental como en la manera de trabajar.

No en vano, el equipo del CIC defiende un trabajo desjerarquizado que apuesta por la capacidad personal de sus profesionales y apuesta porque los psiquiatras, psicólogos, terapeutas ocupacionales, enfermeras y técnicos de cuidados auxiliares se adapten a los tiempos y espacios que necesitan las personas con malestar psíquico.

El consejero valoró el modelo del CIC que se traduce en su atracción en la formación de especialistas en psiquiatría y psicología clínica. En los últimos cinco años, 65 residentes ene stas áreas de otros países han desarrollado estancias formativas en este centro, lo que supone el 87 por ciento de todas las realizadas en Castilla y León en estas especialidades.

En defensa de la Sanidad Pública

Por otro lado, Sáez Aguado consideró «razonable y positivo» que los médicos «se pongan al frente de la defensa de la Sanidad Pública» de la Comunidad, cuyos «elevados niveles de calidad» no tienen «nada que envidiar» a los de otras autonomías, y tiene que «extraerse de una vez del debate partidista».

El titular del ramo se refirió así a un comunicado que divulgó el Consejo de Colegios Oficiales de Médicos de Castilla y León en el que se sostiene que la Sanidad Pública en la Región «es un logro social importantísimo e irrenunciable cuya calidad no puede ponerse en duda por los dirigentes políticos que apoyaron las manifestaciones en las principales capitales».

En la línea de lo expresado por el Consejo y «por otras comisiones de participación hospitalaria», Sáez criticó las posiciones que «trasladan una imagen catastrófica de la Sanidad de Castilla y León», que «no representa lo que es y que acaban desprestigiando al servicio y a los profesionales que trabajan en él».