Castilla y León
Defienden invertir en patrimonio por su rentabilidad y por revitalizar los pueblos
La Federación de Asociaciones reclama más implicación de las administraciones
El presidente de la Federación de Asociaciones por la Defensa del Patrimonio de Castilla y León, Pedro Montarelo apostó que «invertir en patrimonio es rentable» y que ello conllevaría revitalizar aquellas zonas más despobladas, a la vez que aseguró que «deshabitar los espacios conlleva la pérdida de identidad».
Así lo manifestó en Salamanca durante la reunión anual de trabajo de esta institución, donde anunció que la XVII edición del día regional del Patrimonio que se celebrará el próximo 10 de mayo y donde se pondrá especial énfasis en la despoblación. Nontarelo se refirió al peligro y riesgo que sufren los bienes patrimoniales en aquellos lugares done se pierde población, ya que a su juicio «los primeros cuidadores son sus vecinos» y sostuvo que «sonde se pierden habitantes el patrimonio peligra», y eso es lo que ocurre en el medio rural.
El encuentro sirvió para destacar también la importancia de la situación de los «cascos históricos vaciados» de la Región, por lo que pidieron mayor responsabilidad por parte de las administraciones para evitar esa pérdida de población y por tanto, de Patrimonio. Asimismo, hicieron un llamamiento urgente para «establecer programas claros de recuperación por parte de las Administraciones además de la implicación ciudadana».
Para paliar esta situación, consideraron necesario crear un programa riguroso de intervención, el cual tendría que empezar por la catalogación o inventario de esos bienes que haya que conservar, «no solo edificios pioneros, sino hogares o lugares importantes para el legado histórico de las zonas rurales» para mantener esa transferencia de cultura. Apostaron por crear mecanismos que puedan llevar a recuperar esa riqueza que está en peligro y por ello abogaron por la necesidad de «ser creativos e implicar a los ciudadanos de esos lugares, que dan lecciones de estima». De este modo, propusieron la creación de figuras que ejerzan como «guardianes locales», que se encarguen de ello, como garantía para que ese legado permanezca.
Tras esta reunión, aseguraron que trasladarán a las instituciones competentes la petición de elaborar un inventario de esos lugares, porque «antes de intervenir hay que saber cuál es el muestrario, además de establecer prioridades» y pidieron mejores condiciones de seguridad para estos edificios.
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