Asesinato de Isabel Carrasco

Denegada la libertad para la policía local imputada por la muerte de Carrasco

La agente de policía local Raquel Gago, que mantiene la imputación por los delitos de homicidio, tenencia ilícita de armas y atentado a la autoridad

La jueza Sonia González, que instruye el caso por el asesinato de la presidenta de la Diputación de León Isabel Carrasco, ha denegado hoy la libertad de la Policía Local Raquel Gago por su relación con el crimen en el que están imputadas, además, Montserrat González y su hija Triana Martínez.

La magistrada, titular del juzgado de instrucción número 4 de León, considera que el alegato del abogado defensor de Raquel Gago "en nada desvirtúa"los argumentos de la jueza "en cuanto a los indicios existentes en la participación en los hechos", por lo que ha mantenido su permanencia en la prisión leonesa de Mansilla de las Mulas, según recoge el auto al que ha tenido acceso Efe.

La jueza insiste en que la agente de la Policía Local no ha aportado una explicación sobre el motivo por el que "no comentó a nadie"que el día del asesinato se vio con su amiga Triana y, tras el asesinato, "se la encontró en la calle Lucas de Tuy"de la capital leonesa.

La defensa de Gago ha alegado un "bloqueo"que "le impidió entender qué es lo que estaba pasando", aunque la magistrada recuerda que el informe médico-forense concluye que en la acusada "no existen antecedentes previos de patología orgánica ni mental que justifique esa situación".

En base a todo ello, ha declarado que debe permanecer en prisión comunicada y sin fianza, ya que "en base a las pruebas, existe una participación de Raquel Gago en el asesinato de Isabel Carrasco más allá del mero encubrimiento".

Raquel Gago, junto con Triana Martínez y Montserrat González, está imputada por tres delitos, tras los hechos ocurridos el pasado 12 de mayo, cuando Isabel Carrasco falleció tras recibir tres disparos cuando caminaba por la pasarela sobre el río Bernesga para dirigirse a la sede del Partido Popular desde su domicilio.

Se trata de un delito de homicidio, otro de atentado a la autoridad y un tercero de tenencia ilícita de armas.

Montserrat, autora confesa de los disparos, y su hija Triana fueron detenidas el mismo día 12 de mayo, minutos después de cometer el crimen, mientras que Raquel Gago entregó horas después el arma homicida en la Comisaría de Policía y, después, fue arrestada por su supuesta participación en los hechos.