El cooperativismo, clave de futuro del sector primario y la industria agroalimentaria

La consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, puso de relieve que las cooperativas organizadas son «una de las claves de futuro del sector primario y de la industria agroalimentaria», durante la visita que realizó a la cooperativa Alta Moraña, en la provincia abulense.

La consejera de Agricultura y Ganadería se refirió a la importancia de estas organizaciones dentro de los «agricultores y los ganaderos para garantizar mayor competitividad, para optimizar los costes de producción y para ganar en posición dentro de lo que es la negociación de precios en los mercados».

Por eso resaltó que es importante que el sector cooperativo cada vez sea más fuerte y más potente en Castilla y León, por lo que se está elaborando en este momento un nuevo plan de cooperativismo y se han puesto en marcha varios instrumentos de apoyo desde la administración «como son las entidades asociativas prioritarias y las organizaciones de productores».

La propia Alta Moraña a finales de 2017 fue reconocida como entidad asociativa prioritaria, y hay solicitudes para nuevas incorporaciones por jóvenes y modernización de explotaciones (han solicitado incorporarse tres personas como asociación prioritaria y cinco medidas de modernización), lo que «supone que un joven cobra 10.000 euros más si se incorpora a una entidad asociativa prioritaria y si se moderniza la explotación tienen diez puntos más a la hora de obtener financiación», informa Ical. Además, recordó que se están convocando las ayudas para las organizaciones de productores, que en Castilla y León hay tanto para productores de leche y de ovino y de leche de vaca, de modo que hay una «capacidad de organización apoyada desde la administración para intentar que el sector primario, más organizado, tenga mayor capacidad».

Una capacidad que en el caso de Alta Moraña se ha visto que ha «venido creciendo de una manera exponencial» como se nota en la comercialización de piensos, el año pasado con un crecimiento de casi un 30 por ciento, comercializando más de 87.000 toneladas de pienso.

Y ello con «590 socios de la zona» que forman parte de esta cooperativa. Destacó, además, el hecho de que en su consejo de administración, de doce personas, muchos sean jóvenes y que haya dos mujeres.