Castilla y León

El esfuerzo por ayudar a los necesitados recibe el Premio a los Valores Humanos

Cáritas, Cruz Roja y el Banco de Alimentos, distinguidos por su labor social

A la dcha., Fernando Carrasco, José Varela y Godofredo García. Abajo, el jurado, compuesto por Jesús Fernández, Juan José Benitez, Jesús Sanz, José Luis Martín, Florencio Carrera y Luis Benéitez
A la dcha., Fernando Carrasco, José Varela y Godofredo García. Abajo, el jurado, compuesto por Jesús Fernández, Juan José Benitez, Jesús Sanz, José Luis Martín, Florencio Carrera y Luis Benéitezlarazon

Cáritas, Cruz Roja y el Banco de Alimentos han obtenido el Premio Castilla y León de los Valores Humanos 2012, en lo que constituye un reconocimiento al esfuerzo por mejorar la vida de quienes peor lo pasan. El jurado no tuvo dudas. De hecho, la labor social que desempeñan las tres organizaciones no gubernamentales -que constituían una candidatura conjunta- encumbró a aquéllas como grandes favoritas desde el inicio.

Baste referir aquí algunas cifras: cien mil personas en Castilla y León recurrirán al Banco de Alimentos para poder disponer de algo que comer en 2013. Cáritas, por su parte, a través de una red asistencial que alcanza los 4.700 socios, los 4.000 voluntarios y alrededor de 12.000 donantes, da asistencia en la actualidad a 9.000 hogares. Mientras tanto, Cruz Roja, organización que inicialmente surgió con fines humanitarios en zonas armadas, lleva a cabo en Castilla y León una labor multidisciplinar inconmensurable desde 1989. En la actualidad tiene 85.000 socios y 15.000 voluntarios en las nueve provincias.

Los responsables de las tres ONGs en Castilla y León -Godofredo García (Banco de Alimentos), José Varela (Cruz Roja) y Fernando Carrasco (Cáritas Diocesana)- destacaron la ilusión con la que las organizaciones reciben el premio, en unos momentos complicados, en los que, entre todos, hay que arrimar el hombro. Lo explica García: «la crisis ha hecho estragos: hay familias que hace un año vivían mejor porque alguno de sus integrantes trabajaban. Ahora no pueden. Recurren a nosotros, y les ayudamos en la medida que podemos». Sólo el Banco de Alimentos repartió el pasado año comida a 90.000 familias, trece millones de kilos, lo que supuso más del doble que en 2011, cuando se repartieron seis.

Varela, por su parte, recuerda que su labor es callada, pero constante y efectiva, siempre de la mano de la «solidaridad y generosidad» de los castellanos y leoneses, quienes apoyan a la ONG. Desde Cáritas, Carrasco recuerda que la asistencia que desarrollan se centra en alimentación, pero también vestido, costeo de luz y gas, además de la formación para el empleo.

Última acción solidaria

Las instituciones premiadas integran, al alimón con la Junta, la red de distribución urgente de alimentos de Castilla y León que busca dar soluciones inmediatas en toda la comunidad autónoma.

Un reconocimiento a una labor callada

El jurado decidió, de forma unánime, conceder el galardón de manera conjunta a tres de las ONGs que más están soportando los efectos de la crisis. Se reconocen sus dilatadas experiencias solidarias y el esfuerzo continuo en el ámbito de los servicios sociales.