La campaña gratuita de vacunación de la gripe se amplía a siete semanas

VALLADOLID- La campaña gratuita de vacunación frente a la gripe, que arranca este lunes, se amplía a siete semanas, y concluirá el 29 de noviembre. Así lo avanzó el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez, quien dio a conocer que Sacyl ha adquirido para este otoño 700.000 dosis de vacunas antigripales y 45.000 ante la enfermedad neumocócica, que se dispensarán en 250 consultorios o centros de salud de las nueve provincias. Para lograr el escalonamiento de la atención, el consejero invitó a solicitar cita previa, vía teléfono, internet o aplicaciones móviles de Sacyl.

El objetivo es hacer frente a estas enfermedades infecciosas, que afectan a entre un 5 y un 15 por ciento de la población, si bien durante la campaña anterior, la comprendida entre finales de 2012 y principios de este ejercicio, en Castilla y León se cifró en un 2 por ciento la población perjudicada, con efectos claros sobre 50.000 personas. De ellas, algo menos de 200 fuegon catalogadas como casos graves. Para los próximos meses, la previsión es que la temporada sea parecida a la de años anteriores, con una reducida incidencia y características del virus similares.

El consejero explicó también que, durante la pasada campaña, el número de personas que acudieron a vacunarse cayó en 65.000 personas -un 6 por ciento-, hasta las 526.000, un 20,76 por ciento del total, fruto de la suspensión temporal de una vacuna aportada por una farmacéutica decretada por autoridades comunitarias por cuestiones de calidad.

«El ruido que generó esta decisión está sobre la base de esa cobertura vacunal», indicó Sáez Aguado, quien destacó que Castilla y León ocupa el segundo puesto en la España autonómica en esta prestación, y lidera la vacunación entre las comunidades pluriprovinciales.

La adquisición de vacunas frente a la gripe, por parte de Sacyl, para esta campaña, se distribuye de la siguiente manera: 365.000 son adyuvadas o reforzadas -dirigidas a mayores de 70 años-, mientras que las otras 335.000, denominadas fraccionadas, se dirigen a quienes no han alcanzado esa edad.

El desembolso para la compra de estos fármacos ha sido de 3,17 millones de euros (2,73 para la gripe y 0,44 para el neumococo), con un coste un 8 por ciento menor respecto al ejercicio anterior. En los tres últimos ejercicios el ahorro acumulado, como consecuencia de que Castilla y León se integró en la central de compras centralizada que engloba a varias comunidades autónomas, es de casi un 40 por ciento, 1,72 millones de euros.

Por provincias, el reparto de vacunas es el que sigue: Ávila, 53.720; Burgos, 87.288; León, 133.000; Palencia, 47.600; Salamanca, 89.420; Segovia, 35.979; Soria, 26.520; Valladolid, 122.200; y Zamora, 61.800.

A ellas hay que sumar 42.402 que se reservan por si fueran necesarias en lo sucesivo.

Sáez Aguado subrayó que éste «es un problema importante desde el punto de vista de la salud pública, por su incidencia en ámbitos como el sanitario, el asistencial, el económico y el social».

En este contexto, calificó como «obligación ciudadana» el que la población de mayor riesgo acuda a recibir una dosis que «no duele, previene malestar y las bajas laborales». El consejero recordó, asimismo, que el objetivo de su departamento es que, al menos el 30 por ciento del personal sanitario accedan a la vacunación, si bien durante la anterior temporada se logró el 27 por ciento. De igual manera, también se pretende que los enfermos crónicos -mayores de seis meses y adultos- cumplan este trámite y se inmunicen para evitar el agravamiento de otras enfermedades dispares de base.

Población diana

Sáez Aguado enumeró los colectivos incluidos en los grupos de riesgo sanitario y social, a los que insistió en animar a pedir la cita previa para vacunarse. Entre ellos citó a niños y adolescentes, de entre seis y 18 años, que reciban tratamientos prolongados con ácido acetilsalicílico, personas con obesidad mórbida, embarazadas, trabajadores o residentes en centros geriátricos y de asistencia social, personal de servicios esenciales como Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado o Protección Civil. Igualmente, se conmina a vacunarse a trabajadores de granjas y mataderos de aves y otros relacionados con el medio ambiente y personal educativo, especialmente de guarderías y centros de educación infantil.

El alto coste de una enfermedad tan común

El gasto para hacer frente a la gripe, no se ciñe únicamente a estas vacunas. De hecho, según estudios nacionales sobre este problema de salud pública, se apunta que el coste por paciente ambulatorio con gripe se cifra en 940 euros, mientras que en las hospitalizaciones asciende a 6.236 euros. Cierto es que, buena parte de los costes -el 86 por ciento- se refieren a los primeros, que pasan unos diez días de baja, frente a los 31 de los hospitalizados. De modo que, el 46 por ciento de los costes se deben al absentismo, el 41 por ciento al ámbito hospitalario y el 12 por ciento al ambulatorio.