La Comunidad se prepara contra la gripe con más de 620.000 vacunas

En apenas unos días arrancará una nueva campaña de vacunación contra la gripe, y Castilla y León ya está lista para plantar cara a un virus que cada año deja en la cama durante unos días al 15 por ciento de la población además de ser responsable de numerosas complicaciones de la salud e incluso fallecimientos en pacientes que presentan patologías previas graves.

La Comunidad ha adquirido más de 620.000 vacunas para lo cual ha invertido 3,1 millones de euros, con el objetivo de prevenir una de las enfermedades más contagiosas que se distribuirán durante los últimos tres meses de este año como viene siendo habitual en centros de salud, hospitales. colegios y residencias de mayores.

De estas 620.000 dosis, un total de 420.000 corresponden a la vacuna adyuvante o virosómica inactivada, que es la que se dirige a las personas que tienen 65 o más años, mientras que las 200.000 restantes son las denominadas tetravalentes adyuvantes, capaces de hacer frente a cuatro cepas virales, y que se destinan a aquellos ciudadanos que tienen especial riesgo sanitario por patalogías previas y en colectivos de riesgo social, así como en personas que, por su trabajo, como pueden ser los médicos o enfermeros, pueden poner en riesgo a la población.

Calidad asistencial en Burgos

Por otra parte, el Consejo de Gobierno aprobaba ayer otros tres expedientes relacionados con la Sanidad: uno de 1,7 millones para dos expedientes de suministros hospitalarios de alta tecnología para el Clínico de Valladolid; 460.000 euros para dotar de dos nuevas salas de radiología digital en el Complejo Asistencial Universitario de Palencia; y otros 400.000 euros más para contratar diez mil certificados electrónicos para empleados públicos y medio millar de licencias para sistema de terceros no integrado.

También en materia sanitaria, el consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, que hacía de portavoz de la Junta, aseguraba que la tensión que se viven en el Hospital de Burgos tras el cese del gerente Miguel Ángel Ortiz de Valdivielso no supondrá merma alguna en la calidad de la atención que se presta a los pacientes. «Estoy convencido de ello», apuntaba Ibáñez.