Jesús Julio Carnero

La crecida del río Cega obliga a evacuar a 16 familias en Viana

Indignación en los afectados: «No es normal que nadie nos haya advertido del peligro»

La Razón
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No estamos acostumbrados por estos lares a que pasen cosas como la que se produjo ayer en Viana de Cega, un municipio situado a unos quince kilómetros de Valladolid. Ya sea por las abundantes lluvias de los últimos días, por el taponamiento de dos puentes cercanos de los que se retiraron hasta una veinte de toneladas de troncos, o por la crecida del río Pirón, un afluente del Cega, e incluso por el deshielo típico de estas fechas. Sea lo que fuere -se está realizando un informe en la subdelegación del Gobierno- el caso es que el río Cega se desbordó anegó las calles de Viana de Cega. Tanto, que dieciséis familias de este municipio y otra de la vecina localidad de Mojados tuvieron que ser evacuadas de sus casas porque sus vidas corrían serio peligro. Los vecinos no salían de su asombro ante la rapidez y la fuerza del agua. Hasta dos metros llegó a alcanzar el nivel del agua. Ni los más viejos del lugar recuerdan una crecida de estas características en esta zona. Quizás, una que se produjo en 1948, relata uno de los mayores del pueblo, Santiago Pérez, quien recuerda que en aquella crecida todas las casas que había a la entrada de Puente Duero, que eran de adobe, quedaron arrasadas por la fuerza del agua.

Los vecinos afectados están preocupados porque sigue lloviendo pero, sobre todo, están indignados con todo lo que ha ocurrido. No entienden cómo nadie les advirtió del peligro. «No nos quejamos por la crecida del río. Vivimos cerca del cauce y somos conscientes de que esto puede ocurrir, pero no es normal que nadie nos haya avisado del peligro para al menos haber podido mover los vehículos», apunta Clara Juez, una de las vecinas afectadas. Y es que el agua se ha llevado por delante dos furgonetas, dos coches y dos motocicletas de su propiedad que la crecida hizo desaparecer en cuanto amaneció.

Otro de los vecinos afectados, Gustavo Pedraza, sigue aún sorprendido por la rapidez en la que subió el nivel del agua. «Sobre las seis de la mañana el agua nos llegaba al tobillo y tan solo una hora más tarde ya me llegaba por la cintura», explica, mientras recuerda cómo hace doce años se produjo otra inundación pero se actuó de otra forma ya que les avisaron con tiempo y el agua no llegó a entrar en las casas.

Y es que aparte de Viana y Mojados, el río Esgueva también se ha desbordado en la localidad vallisoletana de Villafuerte aunque el agua solo afectó a tierras de labor. Día de intenso trabajo para todos los parques de bomberos de la provincia, los de Peñafiel, Tordesillas, Medina del Campo e Íscar, que tuvieron que emplearse a fondo.

La alerta por nuevas inundaciones permanece en toda Castilla y León

El director general de Protección Civil, Fernando Salguero, visitó las zonas afectadas en compañía del delegado territorial de la Junta, Pablo Trillo, del subdelegado del Gobierno, Martínez Bermejo, y del presidente de la Diputación, Jesús Julio Carnero. Allí, incidió en que la situación de alerta se mantiene en toda Castilla y León, y especialmente en en los cauces del Arlanza, el Arlanzón, Riaza, Duratón, Eresma, Cega y Adaja, por lo que avisó de que podría haber nuevas inundaciones en estas zonas.