La Junta busca un acuerdo social y político en defensa de la remolacha

El Gobierno que preside Juan Vicente Herrera se moviliza en defensa del sector remolachero de la Comunidad y para contrarrestar las «negativas» repercusiones que el impuesto sobre bebidas de alto contenido en azúcar que prevé poner en marcha el Ejecutivo de Mariano Rajoy combatir la obesidad y la diabetes, podría tener en este cultivo.

El Gobierno que preside Juan Vicente Herrera se moviliza en defensa del sector remolachero de la Comunidad y para contrarrestar las «negativas» repercusiones que el impuesto sobre bebidas de alto contenido en azúcar que prevé poner en marcha el Ejecutivo de Mariano Rajoy combatir la obesidad y la diabetes, podría tener en este cultivo.

No en vano, cabe recordar que Castilla y León es la principal comunidad productora de remolacha en la España autonómica, donde se moltura el 85 por ciento de la cuota de producción de azúcar en nuestro país. Además se trata de un sector del que viven más de seis mil familias en nuestra Comunidad y que ayuda a contribuir a fijar población en el medio rural.

La Consejería de Agricultura y Ganadería ya trabaja en un acuerdo con todo el sector remolachero y elaborará un manifiesto que enviará al Gobierno de España explicándole la relevancia que el sector remolachero y azucarero tiene en Castilla y León y los perjuicios que la tasa del azúcar provocaría.

La consejera Milagros Marcos entiende y ve razonable que el Gobierno de España quiera poner en marcha medidas contra la obesidad y corregir problemas de salud derivados del abuso de algunos alimentos o de determinadas conductas alimentarias poco saludables o el sedentarismo, pero no que se quiera hacer desde el Ministerio de Hacienda en lugar del de departamento de Sanidad.

Además, el Grupo Parlamentario Popular buscará en las Cortes un acuerdo de Comunidad con todos los partidos políticos con representación en el Parlamento autonómico para defender uno de los sectores agrícolas con más peso en la Comunidad, con especial hincapié en el remolachero, tras el anuncio del Gobierno central de la previsible tasa del azúcar. Los populares consideran que corregir hábitos alimentarios subiendo impuestos y no fomentando hábitos saludables, medidas de educación para comer de una forma más sana o la práctica del deporte, no es la fórmula adecuada de hacer frente a este problema. El Grupo Parlamentario Populares ya registró en las Cortes, para su debate en el próximo Pleno, una Proposición No de Ley (PNL) para buscar el consenso político de todos los partidos que conforman la Cámara y fijar un acuerdo de Comunidad para intentar revertir la intención del Gobierno de la nación de cargar con un impuesto las bebidas azucaradas.

«Es el momento de apoyar al sector remolachero, que además ha sido muy castigado con sucesivas restricciones, y que el próximo año se enfrenta al fin de las cuotas», apuntan fuentes del PP.