Las empresas de la ONCE crearon más de 1.200 empleos en la Comunidad durante el último año

La organización ONCE, que engloba a las empresas de Ilunion, crearon el pasado año 1.200 nuevos empleos en Castilla y León hasta alcanzar una nómina de cerca de 2.300 empleados en estos momentos en la Comunidad. Así lo desveló el delegado territorial de esta organización en la Comunidad, Ismael Pérez, durante una visita de la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco.

«Las cosas van un poco mejor, lo que nos da cierta tranquilidad y esperanza a medio plazo, hasta el punto de que podemos decir que la situación actual de la ONCE es razonablemente buen, después de los años de la crisis», expuso.

Pérez aseguró que esos recursos económicos permiten prestar servicios sociales a las personas ciegas y seguir siendo solidarios con gente con otras discapacidades. Pese a ello, aprovechó la presencia de la consejera de la Junta para presentarle un documento con peticiones «muy prácticas» en asuntos como las nuevas tecnologías, la accesibilidad, la movilidad en la vía pública, el buen etiquetado de los alimentos, medicamentos o productos de limpieza para que las personas ciegas accedan a una información clave así como la educación y el empleo. «No son muchas cosas pero básicas porque si se hacen bien nos facilitan la vida», señaló. Es por ello, que el delegado territorial apostara por continuar con el «camino» de la colaboración institucional entre la Junta y el Grupo Social ONCE.

Isabel Blanco reconoció que su primera reunión de trabajo con los responsables de la organización en Castilla y León fue «muy interesante» y «muy productiva», ya que permitió a su equipo conocer el funcionamiento de la organización, su fundación e Ilunion. «Nos ponemos a su disponibilidad para cubrir sus necesidades y conocer sus reivindicaciones», afirmó.

Por otra parte, Blanco anunció que la Junta lanzará un «ambicioso» programa de apoyo a las mujeres que han dejado su trabajo «para hacer un paréntesis» para el cuidado de hijos o de personas mayores y dependientes y que ahora desean regresar al mercado laboral. Un plan que estará compuesto por formación, iniciativas y ayudas a estas mujeres, además de que incidió en que se hará «una apuesta clara» por el emprendimiento, en especial en zonas rurales, en colaboración con otras consejerías de la Junta.

Por último, respondió al Sindicato de Enfermería Satse que las camas cerradas en las residencias públicas de mayores de la Región se enmarcan en el acuerdo del Diálogo Social de transformar las plazas destinadas a personas válidas en dependientes y que no llegan a las 400 denunciadas. Además, recordó que la lista de espera en las residencias de personas mayores es relativa debido a la atención sanitaria.