Política

Castilla y León

Las garantías que ofrece Iberaval impulsan cuatro empleos en cada empresa

Las avaladas por la Sociedad de Garantía Recíproca facturan 12,23 puntos más que el resto

Pablo Pombo, Jesús Ramírez, Pedro Pisonero (director general de Iberaval), Mariano Carbonero y Horacio Molina en la presentación de un estudio sobre su impacto en el crecimiento y el empleo de las empresas
Pablo Pombo, Jesús Ramírez, Pedro Pisonero (director general de Iberaval), Mariano Carbonero y Horacio Molina en la presentación de un estudio sobre su impacto en el crecimiento y el empleo de las empresaslarazon

Las empresas avaladas por Iberaval facturan 12,23 puntos más que aquellas sin garantías, invierten en bienes de capital un 12,36 por ciento por encima; y generan un 9,21 por ciento más de empleo, con una media de cuatro puestos nuevos por compañía. Asimismo, la intervención de la Sociedad de Garantía Recíproca (SGR) de Castilla y León, posibilita un incremento de la financiación de las sociedades atendidas en 20,59 puntos respecto a las que no lo están. «Somo útiles», resumió el director general de Iberaval, Pedro Pisonero.

El alto ejecutivo presentó los datos del estudio «Evaluación de la adicionalidad económica y financiera de Iberaval», elaborado por un grupo de investigadores de la Universidad Loyola de Andalucía, integrado por Horacio Molina, Mariano Carbonero y Jesús Ramírez y Pablo Pombo (Universidad de Córdoba).

Pisonero precisó que las empresas beneficiarias elevaron un 18,49 por ciento sus ingresos, mientras que la subida entre las que no contaban con garantía el crecimiento fue del 7,01 por ciento. Asimismo, las actividades que contaron con aval incrementaron un 12,76 por ciento los bienes de capital, mientras que las que no eran beneficiarias sólo subieron la inversión un 0,31 por ciento. En cuanto al empleo, las avaladas aumentaron su capital humano un 19,61 por ciento, frente al 11,15 por ciento de las que no recibieron garantía.

Por último, las empresas con aval de la SGR incrementaron un 21,79 por ciento la deuda financiera, mientras que las que carecieron de garantía sólo elevaron su financiación un tres por ciento.

Pisonero destacó que se trata de una investigación «pionera» en España y que afrontaron con «cierto miedo».