León contará con un centro de atención para niños desfavorecidos

Lo abrirá y costeará la Fundación Delia Morán de México, que quiere devolver así «lo mucho que nos ha dado esta ciudad»

La Fundación Delia Morán de México, muy ligada a León, quiere seguir estrechando sus lazos con la capital leonesa y devolver a los leoneses «lo mucho que nos han dado», según decía ayer el representante de la familia, Daniel Chávez Morán, en vísperas de que hoy se inaugure la escultura del pendón leonés, ya instalada en la explanada del Auditorio leonés, donada por la familia Morán en agradecimiento al cariño recibido por la tierra de su bisabuelo, Miguel Morán.

Daniel Morán, fundador también del Grupo Vidanta, anunciaba que la Fundación tienen previsto abrir en la capital leonesa un centro social y de atención para niños desfavorecidos de la ciudad, que costeará la propia Fundación, y cuyo objetivo es dar las mismas oportunidades a todos los menores, pero también inyectar valores y principios y lograr que los niños «tengan siempre una sonrisa en la boca». Pero el Grupo Vidanta apuesta también por la capital leonesa para poner en marcha proyectos que creen empleo y riqueza y generen actividad económica. Así, ya han iniciado el reclutamiento de un centenar trabajadores leoneses para iniciar su formación en México. «Queremos formar en nuestro país a los leoneses para que luego regresan a la ciudad y puedan crear fuentes de trabajo con aquellas personas que conocen a la perfección la cultura y que demuestran el gran cariño por su tierra», explicaba Chávez, mientras recordaba que en estos momentos hay tres leoneses trabajando en el grupo, inmerso en el sector hotelero principalmente, pero con presencia también hotelero pero también en grandes infraestructuras, como aeropuertos o carreteras, a la espera de alcanzar la veintena al final de año. El alcalde de León, Antonio Silván, por su parte, señalaba que León estará siempre en deuda con la familia Morán y confía en mantener y mejorar en el futuro estas relaciones. La jornada de ayer finalizaba con la firma en el Libro de Honor del Ayuntamiento a cargo de Chávez y de la presidenta de la Fundación, Jeanette Dayana Pérez.