Ávila

Más ayudas para emplear a parados en los pueblos con proyectos turísticos y culturales

De estas subvenciones, abiertas hasta el 16 de abril, se beneficiarán desempleados de larga duración

El consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, escucha las explicaciones del alcalde de El Tiemblo, Rubén Rodríguez, durante su visita a «Los hornos de las tinajas»
El consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, escucha las explicaciones del alcalde de El Tiemblo, Rubén Rodríguez, durante su visita a «Los hornos de las tinajas»larazon

La Consejería de Empleo, a través del Ecyl, acaba de convocar, un año más, una línea de subvenciones por valor de 13,5 millones de euros, para emplear a parados en los pueblos con menos de 5.000 habitantes, para que lleven a cabo obras y servicios relacionados con proyectos turísticos y culturales.

Los Ayuntamientos interesados tienen hasta al 16 de abril para presentar sus solicitudes e iniciativas que quieren llevar a cabo para dinamizar la actividad cultural y turística de su localidad y crear puestos de trabajo, dirigidos principalmente a parados de larga duración, mayores de 45 años sin prestaciones o cargas familiares o jóvenes menores de 35 sin cualificación.

Una línea de ayudas que viene desarrollándose varios años con bastante demanda por parte de los municipios, pero también con gran éxito, por cuanto se está consiguiendo generar empleo a través del turismo.

De hecho, el año pasado se crearon más de 1.500 puestos de trabajo. Una cifra que la Junta espera alcanzar también en 2018, según informan fuentes del departamento que dirige Fernández Carriedo. Pero, también, además de dinamizar la actividad económica del municipio y atraer a más turistas.

Modelo turístico

Un ejemplo de buen uso de estas ayudas del Plan de Empleo Local es el de la localidad abulense de El Tiemblo, cuyo Ayuntamiento, dirigido por el popular Rubén Rodríguez, pudo contratar a cuatro personas para desarrollar los trabajos de reforma en «Los hornos de las Tinajas», gracias a los 40.000 euros que recibió en la convocatoria de 2017.

Las instalaciones, muy deterioradas por el paso del tiempo, se mejoraron ostensiblemente, y se construyó un horno nuevo en el que ahora se imparten los cursos y talleres de cerámica y cestería, con una gran acogida.

De hecho, y según avanza a LA RAZÓN la concejal de Cultura y Festejos, Henar González Blasco, son cerca de cuarenta personas las que participan en estos dos talleres, la mayoría del municipio y alrededores.

Los trabajos que se realizaron en su conjunto, tanto de eliminación de la vegetación y maleza existente, como de cimentación y estructura, albañilería, carpintería de madera y cubierta, costaron en total 81.500 euros.

Situados en la zona alta de la población, «Los hornos de las Tinajas» son unas construcciones del siglo XIX levantadas para atender la demanda de cerámica, por el auge que adquirió el viñedo y la importancia para almacenar los vinos que se elaboraban.

La concejal explica que desde que el pasado mes de junio se abrieran al público, «se han convertido en el principal atractivo turístico de la localidad», junto a la ermita de San Antonio, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, el colegio «Toros de Guisando» -de estilo neomudéjar-, o la plaza de toros, también destinada para actividades culturales.

Tal es el éxito de estos hornos recuperados, que están recibiendo la visita de entre dos y tres autobuses a la semana, con personas mayores procedentes de toda España, que participan de las actividades del Imserso, además de numerosas visitas de escolares de la provincia.

De cara al futuro, Henar González cuenta que quieren aprovechar también estos hornos para que se expongan los trabajos que se realizan en los talleres de cerámica y cestería, como una actividad cultural y turística más complementaria a la visita.