Castilla y León

Sindicatos y CEOE elogian el diálogo en Castilla y León

El presidente autonómico recuerda que «dialogar es también una forma de gobernar» durante su intervención en el CES

Marcos Peña, Fátima Báñez y Juan Vicente Herrera, ayer, en la sede del Consejo Económico y Social
Marcos Peña, Fátima Báñez y Juan Vicente Herrera, ayer, en la sede del Consejo Económico y Sociallarazon

El presidente autonómico recuerda que «dialogar es también una forma de gobernar» durante su intervención en el CES.

Ayer tuvo lugar en Madrid la Jornada de presentación del Diálogo Social en Castilla y León en la que todos los ponentes quisieron reconocer el valor de esta práctica en la comunidad autónoma. El encargado de inaugurar el acto, que se celebró en la sede del Consejo Económico y Social de España (CES), fue su propio presidente, Marcos Peña.

Al comienzo de su intervención, Peña quiso reconocer que «el diálogo social es algo poco habitual, pero lo sorprendente en Castilla y León es que es algo cotidiano, que se hace todos los días». Afirmó que, en este sentido, la esencia de la política es «promover la convivencia» y que ello exige «reconocer que hay diversos intereses y conciliar esos intereses», en referencia a todos los ciudadanos. En la primera parte de la jornada, en la que participaron los principales participantes en el diálogo social en Castilla y León, todos coincidieron unánimemente en que el motivo de la jornada no era enseñar cómo deben actuar el resto de las comuidades autónomas, en lo que a consenso y diálogo social se refiere, sino mostrar la experiencia exitosa, de su región.

Carlos Fernández Carriedo, consejero de empleo de Castilla y León, puso en valor que el éxito de los 16 años de experiencia que posee Castilla y León en esta materia reside en el diálogo y la «voluntad» de todos los agentes económicos y sociales que intervienen (UGT, CC OO, CECALE y el propio Gobierno regional).

El modelo utilizado por la comunidad y que fue definido por sus representantes como «de máximo nivel» se basa en tres puntos principales: en primer lugar, todos los acuerdos deben ser útiles para la sociedad y mejorar la vida de los ciudadanos; el segundo requisito es que todos los acuerdos deben estar respaldados en unanimidad por las cuatro partes; por último, se establecen mecanismos de seguimiento y vigilancia que garanticen la continuidad de dichos acuerdos. El secretario general de CC OO en Castilla y León, Vicente Andrés, quiso destacar que su modelo de diálogo social ha superado «una bomba, que fue el periodo de crisis» y que suavizó las consecuencias más adversas de ésta. De entre los más de 100 acuerdos a los que se han llegado en estos 16 años destaca: la lucha contra la deslocalización, la protección social frente a la crisis o las ayudas a la dependencia. Faustino Temprano, secretario general de UGT en Castilla y León, planteó que es necesario «seguir mimando» el diálogo social para garantizar su futuro y continuar luchando contra los grandes problemas de la comunidad autónoma.

Abrir Ventanas

Durante la segunda parte de la jornada, titulada «el Diálogo Social en Castilla y León y su posible extensión a otros territorios», el secretario general de CC OO, Unai Sordo, denunció que «la tendencia del ejercicio político es hacia la unilateralidad y debe renunciarse a ella, como se hace en Castilla y León». Sordo cree que el Gobierno y los agentes sociales deben relegitimar los espacios de representación y de participación, «que han vivido una profunda crisis», y abogó por aprovechar las «ventanas» de oportunidad, como la que se abrió con el acuerdo sobre el Salario Mínimo Interprofesional. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, utilizó un tono más propio de la denuncia recordando que «en España ha habido periodos importantes de concertación social y otros en los que ha sido casi nula». Afirmó que esto se debe a que «la coyuntura parlamentaria pesa mucho» y «demasiadas veces se utiliza la frase de que ‘el Gobierno ha sido elegido para gobernar’»; después, se preguntaba si concertando no se gobierna.

En una línea próxima a los planteamientos e inquietudes de Álvarez, Juan Rosell, presidente de CEOE, defendió el resurgimiento del diálogo social en las comunidades autónomas en las que ha desaparecido, pues «diálogo quiere decir valentía frente al futuro. Por eso, o nos adelantamos, o nos quedamos desfasados».