Arrancan las rebajas sin calendario claro

Algunos comercios catalanes se adhieren a la ley estatal y comienzan la temporada de descuentos, aunque la mayoría esperará al siete de enero. Este año el gasto por persona será de 90 euros y las contrataciones crecerán un 15%

Desde el 2013 cada comercio decide cúando celebrar las rebajas y qué franja de descuentos establecer, sin la más mínima restricción sobre el tipo de prendas que pueden estar o no sujetas a esa promoción. Es por ello que muchas tiendas cuelgan el cartel de rebajas el 2 de enero, aprovechando la vorágine consumista que sacude al mundo occidental con más fuerza si cabe por estas fechas.

El gobierno catalán intentó introducir una normativa al margen de la ley estatal, estableciendo dos únicos periodos de rebajas (del 7 de enero al 6 de marzo y del 1 de julio al 31 de agosto), pero sin éxito. El Tribunal Consitucional recurrió esta norma y muchos comercios catalanes han tentado ya a los consumidores, como ya ocurrió el año pasado, con hasta promociones del 40 por ciento.

Aún sabiendo que lo que aparece en el catálogo de las rebajas son los pantalones de campana que llevan acumulados en el almacén desde el 2000, siempre se tiene la esperanza de encontrar la mejor ganga. Y de esta temporada. Pero lo difícil es acertar con el comercio. Muchos de ellos han comenzado a etiquetar las prendas con un precio inferior. Otras se esperarán al siete de enero, la fecha mágica del antiguo calendario oficial.

Si lo que se desea es encontrar un regalo de Reyes a un precio más asequible, grandes firmas como Mango, H&M, Cortefiel, Bimba&Lola o Purificación García, entre otras, han iniciado ya su periodo de rebajas. Los devotos de Inditex, no obstante, tendrán que esperar a que pasen por casa Melchor, Gaspar y Baltasar para encontrar prendas con descuentos.

El sector comercial vaticina que el gasto medio por persona en estas rebajas de invierno se situará entre los 90 y 100 euros, una cantidad superior al 2015 gracias a la confianza de las familias y el inicio de la recuperación económica. El entusiasmo se notará también en las contrataciones, con un incremento del 15 por ciento.