Testigo directo: Atrapado en el aeropuerto del Prat

Durante horas no hubo ninguna posibilidad de llegar a Barcelona

A media de tarde de ayer, la situación en el aeropuerto del Prat ya era dantesca. Por un momento, pareció que los CDR y los radicales independentistas se marchaban, pero no. A esas alturas, el Metro, los buses y el tren estaban cortados. Lo peor estaba por llegar.

Este periodista, al igual que los CDR, sufrió un auténtico calvario para llegar al Prat, teniendo en cuenta que la L), que llega hasta al aeropuerto, estaba cerrada por los cuerpos policiales. Una vez en la terminal 2, sin los buses que van a la 1, tocó un “paseo” de más de una hora y media y lloviendo.

En la terminal 1 del aeropuerto miles de independentistas lo colapsaron todo durante horas. Era casi imposible salir, a no ser que tuvieras que volver a caminar otras dos horas hacia la otra terminal. El ambiente era indescriptible. Todo colapsado, y centenares de turistas americanos, japoneses, europeos, o lo que sea, absolutamente consternados y asombrados por la situación.

Literalmente, no se podía salir de la terminal 1 del aeropuerto. Los CDR bloquearon todas las salidas, que encima estaban vigiladas por antidisturbios. Ibas de una planta a otra y no había manera de escapar. Sin taxis, ni buses, ni Metro.

Todo eran consignas gritadas por miles de independentistas. “Ni un pas enrera” (Ni un paso atrás” triunfó, además de “Libertad presos políticos” y muchos otros lemas. El tiempo pasaba y no había manera de salir.

Finalmente, este periodista encontró una salida por un aparcamiento, pero tuvo que volver a caminar dos horas hacia la otra terminal. El servicio de Renfe funcionaba, pero los andenes se sobresalían. Nadie pagó nada. Era el único servicio que funcionaba.