Barcelona vuelve a emitir deuda

Mientras la Generalitat sigue con los mercados cerrados, el Ayuntamiento ha realizado una emisión de bonos sociales por valor de 35 millones de euros. El dinero servirá para invertir en proyectos de educación y empleo.

Barcelona se ha convertido en la primera ciudad del Estado a emitir deuda pública de carácter social. Es decir, el dinero que reciba de los inversores (35 millones de euros) se tendrán que destinar obligatoriamente a proyectos de educación, de empleo o de servicios sociales. Con esta operación, el Ayuntamiento diversifica aún más las fuentes de financiación puesto que, por primera vez, los bancos tradicionales quedarán en la penúltima posición.

Si el año 2016 el Ayuntamiento consiguió de la banca tradicional un 92% del dinero necesario para hacer inversiones, este 2017 las entidades financieras habituales sólo han aportado un 22% del capital. Esto ha sido consecuencia de la diversificación de la financiación municipal, ya que el ejecutivo de Ada Colau ha dado peso a la banca ética: este año ha aportado un 18% del dinero (en 2016 fue un 8%).

Además de los bancos, el Ayuntamiento también ha incluido en la balanza financiera dos fuentes más. Por un lado, el Banco Europeo de Inversiones ha aportado 40 millones de euros para ampliar el parque de vivienda pública; por otro, Barcelona ha emitido deuda pública de carácter social por un valor total de 35 millones de euros.

Con los bonos sociales, Barcelona se ha convertido en la primera ciudad española y la primera administración catalana a emitir deuda pública con cláusulas que le obligarán a invertir el dinero recaudado en proyectos de educación, de empleo, de servicios sociales o relacionados con actuaciones medioambientales. El vencimiento de los bonos a 10 años.

En total, este 2017 las arcas del Ayuntamiento han recibido 126,1 millones de euros de financiación nuevo. Ahora bien, la balanza fiscal cerrará el año con 835,5 millones de euros de endeudamiento; una cifra muy similar a la de los últimos años y que se sitúa en mínimos históricos del consistorio.

Por otro lado, la Banca Ética también se abre camino en sus relaciones con el consistorio: la Comissió de Govern ha aprobado las ofertas para la normalización de préstamos a largo plazo con las entidades Fiare Banca Ética y Triodos Bank y finalmente, con el Banco Sabadell.

Con estas operaciones financieras, el endeudamiento del ayuntamiento se mantendrá en los 835,5 millones de euros a finales del 2017, la cifra más baja de la última década lograda hace dos años.