CiU amenaza con hacer la consulta con unas elecciones plebiscitarias

BARCELONA– El acuerdo de legislatura que firmaron CiU y ERC describía sin ambages los pasos a seguir para poder convocar la polémica consulta soberanista el próximo año. El primero, aprobar una declaración de soberanía en el Parlament. Luego tocaba plantear la convocatoria de una consulta pactada y legal al Gobierno de Mariano Rajoy. Pero como CiU y ERC dan ya por hecho que la negociación con el Gobierno caerá en saco roto, paralelamente, el Parlament ha iniciado los trámites para aprobar la ley de consultas catalana para dar cobertura a un referéndum sobre la independencia con carácter no vinculante al margen de la Constitución.

Mas cuenta también con que el Gobierno lleve la ley catalana de consultas ante el Tribunal Constitucional (TC) e, incluso, ha admitido que puede que la consulta no se celebre si llegado el momento se inicia un proceso de aprobar e impugnar leyes eterno. Pero lo que no contemplaba era que el Gobierno le plantara cara antes de hora impugnando la declaración de soberanía ante el TC.

Sin «plan B»

Aunque en el pacto de legislatura con ERC no aparece ningún «plan B», Mas no descarta la celebración de unas elecciones plebiscitarias si el Estado rechaza negociar un referendo y la ley catalana de consultas. Lo explicó ayer el secretario de organización de Convergència Democrática de Catalunya (CDC), Josep Rull. «Si el Estado impide cada una de las iniciativas que se tomen en Cataluña para que pueda convocarse una consulta soberanista, se pueden convocar unas elecciones de base plebiscitaria», avisó.

No fue un aviso hecho con un tono amenazador, pues a los nacionalistas no les interesa romper el diálogo con el Gobierno antes de sentarse a hablar. En declaraciones a la televisión pública catalana, Rull reiteró que CiU quiere agotar todas las vías que tiene a su alcance antes de plantearse unas elecciones autonómicas en clave plebiscitaria.

En su última visita a Bruselas, antes de las elecciones del pasado 25 de noviembre, Mas no descartó la idea de plantear la consulta soberanista mediante unas elecciones plebiscitarias, durante una conferencia en la organización Friends of Europe, un lobby de reflexión sobre la Unión Europea (UE). Mas avanzó que una manera de celebrar una consulta por la vía legal sería transformar una convocatoria electoral en un referéndum. Es una idea que también contempla ERC. El mismo Oriol Junqueras no descartó la semana pasada que CiU y ERC se presenten en unas futuras elecciones con una lista conjunta que avale la independencia.

Instrumentos

Tanto Mas como Junqueras nunca han escondido que pueden hacer uso de más de un instrumento para llevar a cabo una consulta en la que los ciudadanos de Cataluña puedan opinar si quieren o no un estado propio. Una fórmula es convocar unas elecciones con un programa electoral simple y claro, en el que se apueste abiertamente por la independencia de Cataluña. Los ciudadanos, entonces, tendrán la opción de elegir, sin ambigüedades, si quieren que gobierne una formación que apuesta por la independencia.

En esta apuesta, CiU se juega su futuro como «pal de paller» de Cataluña, pues en el último sondeo del Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat confirmó que Esquerra lograría romper la histórica hegemonía de CiU y le rebasaría en intención directa de voto. Demostrado queda ahora en las encuestas que ERC saca partido de la apuesta de CiU por situar la independencia en el centro del debate político, pero habrá que ver si en futuros sondeos el apoyo de los republicanos a unos presupuestos impopulares pasa factura a los de Oriol Junqueras.

Paralelamente al trabajo interno, desde negociar con el Gobierno de Rajoy a sacar adelante la ley de consultas, el ejecutivo catalán también explora complicidades en el exterior. Busca lograr respaldo internacional para la consulta y por eso ha puesto en marcha una agenda que implica aumentar sus viajes al extranjero.