Literatura

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Daniel Vázquez Sallés: «Esto de la literatura es un oficio muy extraño»

El periodista y escritor presenta su novela "Lena"

El escritor y periodista Daniel Vázquez Sallés
El escritor y periodista Daniel Vázquez Salléslarazon

Del explosivo encuentro entre Martín, un escritor y asesino en serie que usa el alias de Knopfler, y Lena, una novelista y mantis religiosa, surge un relato negro que es la nueva novela del escritor y periodista Daniel Vázquez Sallés.

Del explosivo encuentro entre Martín, un escritor y asesino en serie que usa el alias de Knopfler, y Lena, una novelista y mantis religiosa, surge un relato negro que es la nueva novela del escritor y periodista Daniel Vázquez Sallés. «Lena», publicado por Alrevés, es una historia de tintes policíacos, pero donde la mirada en crítica y ácida al mundo editorial tiene una presencia muy importante.

–¿Cómo nace esta historia?

–Hace años que quería escribir una historia de amor entre un asesino a sueldo y una escritora. Me gustaba la idea de cómo se complementaban y construían su vida, haciendo de su necesidad cierta virtud. Me costó mucho encontrar la estrutura del libro y no me puse a escribir hasta tenerla.

–«Lena» es ¿una novela negra, una historia de amor o sobre el mundo literario?

–Es una reflexión sobre el paso del tiempo. Todo nace a partir de una reflexión y de ahí surge una reflexión sobre la vida, el amor y la soledad a partir de dos personas que son totalmente amorales. algo que tenía muy claro, y que convierten el mundo en una isla en la que ellos son los únicos supervivientes. En cuanto a géneros, siempre escribo novelas que son multigéneros. En general, en el género negro ya hay muchos géneros dentro. Esta es una historia de amor sórdida.

–Pero también nos encontramos con una crítica al mundo editorial.

–Es un mundo ácido porque él es un escritor frustrado y ella una escritora que ha entrado en decadencia. Así que ellos ven ese mundo con toda la reprobación del mundo. Son dos personajes que van a la contra. ¿Crítica? Cada uno tiene su visión del mundo literario, pero uno que ya lleva mucho tiempo en esto ve que hay una parte externa en la que todo parece fantástica, aunque luego acabas dependiendo de las ventas de libros, de una industria. Eso es algo que no tiene nada que ver con el trabajo solitario del escritor.

–En «Lena» encontramos fiestas literarias, agentes, autores... Es tentador preguntar si está basado en hechos reales.

–Claro, evidentemente está basado en hechos reales, en un mundo que conozco un poco. Sí que le diré que esa impresión que tiene Martín de Lena, esa primera vez en la playa, es algo que le presté yo a él.

–¿De quién está más cerca: de Martín o de Knopfler?

–De Knopfler. Nunca he aspirado a ser un asesino en serie, pero sí que es verdad que en el fondo la vida de Martín es en el fondo una trampa, una tapadera y una mentira. Porque es una mentira esa vida soporífera de casa adosada.

–En el libro se llega a decir que el oficio de escritor es algo parecido a una pesada mochila.

–Esto es un oficio muy extraño. Cuando me preguntan si disfruto escribiendo digo este es un trabajo muy complicado y también una obsesión enfermiza. Por ejemplo, mientras escribo pienso y sueño con Lena y Knopfler. Siempre hay un punto de cabreo o una crisis cuando llevas ciertas páginas porque te preguntas si esto puede tener cierto interés. Si eres escritor, no puedes evitar dejar de imaginar cosas y buscar buenas historias que contar.