El Govern retoma la batalla del déficit

Apenas 69 días, agosto, septiembre y ocho días de octubre, ha durado la tregua que la Generalitat ha dado al Gobierno en su lucha contra el déficit. Si este año acabó prorrogando los presupuestos, tras alargar las negociaciones hasta que el Gobierno acabó fijando un objetivo para Cataluña del 1,58 por ciento para 2013, una cifra que no satisfizo a la Generalitat, de cara a 2014, prefiere librar la batalla en los tribunales. El portavoz del gobierno catalán, Francesc Homs, informó ayer de que la Generalitat presentará un recurso contencioso administrativo contra el límite del 1 por ciento impuesto por el Estado a todas las Comunidades Autónomas, en 2014.

En un escenario de tensión «in crescendo» entre Gobierno y Generalitat, la decisión del ejecutivo de Artur Mas no facilita el diálogo, que unos y otros se prometieron para encauzar una relación cada día más maltrecha.

Homs descartó que la iniciativa de la Generalitat, de presentar una denuncia contra el Gobierno, no tiene por qué frustrar un diálogo que, hoy por hoy, es inexistente. Explicó que el gobierno catalán ha tomado esta decisión después de que Mariano Rajoy no haya contestado al requerimiento presentado por la Generalitat para modificar el objetivo de déficit de 2014. Y alegó que no es un capricho, que se acogen a la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que CiU apoyó en su día en el Congreso.

La Ley de Estabilidad Presupuestaria dice que hasta 2020, la reducción del déficit público debe distribuirse entre el Estado y las Comunidades Autónomas, en función de los porcentajes que tenían a 1 de enero de 2012. Teniendo en cuenta que entonces, a las autonomías les correspondía un 39 por ciento del déficit total, en 2014, les correspondería un 2,2 por ciento, en vez del 1 por ciento fijado por Cristóbal Montoro.

Este 1,2 por ciento más de margen permitiría a la Generalitat disponer de 2.400 millones más de margen para elaborar los presupuestos de 2014.