Barcelona
El metro también amenaza con una huelga en el MWC
El transporte público, como el taxi, podría poner en dificultades al congreso de móviles
De un tiempo a esta parte, el Mobile World Congress (MWC)se ha convertido en el escaparate perfecto de cualquier tipo de reivindicación laboral. Y la próxima edición, a finales de febrero, no podía ser una excepción. Con el agravante de que en esta ocasión podría darse una doble huelga, el metro y los taxis, que pondría al evento en serios problemas de movilidad.
De un tiempo a esta parte, el Mobile World Congress (MWC)se ha convertido en el escaparate perfecto de cualquier tipo de reivindicación laboral. Y la próxima edición, a finales de febrero, no podía ser una excepción. Con el agravante de que en esta ocasión podría darse una doble huelga, el metro y los taxis, que pondría al evento en serios problemas de movilidad.
Así las cosas, los taxis, que ya paralizaron el tráfico de Barcelona hace unas semanas aseguran que seguirán protestando si no se atienden sus demandas y señalan al Mobile World Congress como momento en el que podrían volver a parar el tráfico de la capital. El motivo de la protesta, secundada por la mayoría de organizaciones del taxi, es que aseguran que el Ayuntamiento de la capital no ha cumplido con los compromisos adquiridos el pasado verano, en concreto, sobre el intrusismo laboral en el sector.
A este amenaza, ayer se añadió el metro de Barcelona. Los sindicatos se plantean repetir durante el próximo congreso los paros que complicaron la movilidad de la ciudad durante la última edición de este evento internacional como medida de presión para avanzar en la negociación del convenio colectivo.
Tras un par de meses en el que las negociaciones del convenio han estado paralizadas, la dirección y el comité de empresa del Metro han retomado en las dos últimas semanas las conversaciones que deberían terminar en un acuerdo que haga posible un nuevo documento para el período 2016-2019, que sustituirá al prorrogado desde 2008.
En las cuatro reuniones de esta nueva etapa celebradas hasta ahora, los sindicatos coinciden en señalar que la dirección del Metro se ha sentado a la mesa con escasa voluntad negociadora, por lo que no descartan recurrir a medidas de presión como nuevos paros durante el MWC, que se celebrará del 27 de febrero al 2 de marzo. «No se vislumbra ningún acuerdo y el Congreso Mundial de Móviles está ahí. Si la empresa no pone de su parte, no sabemos qué puede pasar. Ojalá no tengamos que llegar al conflicto pero si lo tenemos que hacer, se hará», explicó a Efe el secretario general de la sección sindical de la UGT en Metro de Barcelona, Carlos González.
González lamentó que, entre otros aspectos, las negociaciones estén atascadas en puntos aparentemente poco conflictivos, como la reclamación sindical de que se ofrezcan puestos alternativos a trabajadores con determinados problemas de salud. El representante de UGT subrayó: «Nuestro objetivo no es convocar nuevas huelgas, pero si la dirección no da un paso adelante, esa sería una posibilidad».
CCOO también criticó la actitud de «no negociación» de la dirección de Metro y se preguntó si «tiene la intención de dilapidar la negociación» y si «nos quieren abocar al enésimo conflicto laboral», según un comunicado colgado en las redes.
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