El TNC abre temporada con un regreso al teatro de variedades

Grandes iconos de la cultura universal, de Charles Chaplin a Houdini, empezaron su carrera en los llamados espectáculos de variedades, cajones de sastre en que cabían diferentes actuaciones de pocos minutos que se sucedían uno detrás de otro. Todavía faltaba tiempo para la televisión, Internet, las consolas. El entretenimiento estaba en manos de los artistas, actores, músicos, cómicos, magos, equilibristas y un largo etcétera. En el Paral·lel, las variedades vivieron su gran apogeo con la llamada «revista» y establecieron a la avenida barcelonesa como el mayor reclamo popular de la ciudad.

El Teatro Nacional de Cataluña (TNC), para empezar su nueva temporada, ha decidido homenajear esta vieja forma de entender el teatro y presenta «Taxi... al TNC», un espectáculo «sui generis» que cuenta con 18 números musicales y la participación de 76 intérpretes, de Carme Sansa a Mercè Arànega o Lluís Homar, pasando por jóvenes como Bernat Quintana o Alba Pujo.

A partir de este miércoles y hasta el 6 de octubre, el TNC presentará un espectáculo que el propio Xavier Albertí, nuevo director artístico del teatro, no dudó en calificar ayer de «imposible» por su grandiosidad. Por ello, quiso agradecer el «absoluto entusiasmo» de todos los intérpretes que se involucraron en el mismo, sin los cuales hubiese sido impensable ni plantearse una idea así.

Con dramaturgia de Lluïsa Cunillé, Josep Maria Miró y Xavier Pujolràs, la obra incluye dieciocho números, que presenta el actor Jordi Boixaderas y que suponen una revisión de la revista musical, aunque sin un carácter nostálgico, sino con puentes a la actualidad.