Europa ignora la carta de Mas para lograr apoyos a la consulta

Europa se está tomando con calma contestar a Artur Mas. A juzgar por la escasez de respuestas recibidas hasta el momento en la sede de la Generalitat, no parece precipitado afirmar que Europa no ha respondido con entusiasmo a la petición de gestos de simpatía hacia la consulta soberanista que el presidente, en forma de carta, envió el pasado 20 de diciembre a 26 jefes de Gobierno (todos menos Mariano Rajoy) de la UE y al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.

El secretario de Asuntos Exteriores de la Generalitat, Roger Albinyana, contestó evasivamente al ser preguntado en una entrevista en Cataluña Radio por si se había recibido alguna respuesta. El político catalán afirmó que «algunos países» ya habían contestado, sin especificar a que miembros de la UE se refería. Lo cierto es que después de que el jueves el Gobierno francés se desentendiera del asunto remitiendo a las declaraciones de Hollande durante la última bilateral hispano francesa sobre la cuestión catalana, ayer fue el viceportavoz del Gobierno alemán, Georg Steiner, quien afirmó desconocer la existencia de la carta de Mas. El Ejecutivo liderado por Angela Merkel dijo además por boca de Steiner que «sobre ese asunto no tengo absolutamente nada que decir».

Fuentes diplomáticas consultadas por LA RAZÓN comentaron que previsiblemente los gobiernos europeos a las que se ha dirigido Mas no querrán involucrarse con las aspiraciones independentistas del nacionalismo catalán ya que conocen muy bien, gracias a sus constantes contactos con las embajadas de España, la situación en nuestro país, y, además, la posición de la Unión Europea es de sobra conocida después de las repetidas y rotundas declaraciones de Durao Barroso y Vam Rompuy en las que ambos líderes afirmaron sin ambages que Cataluña quedaría fuera de la Unión Europea tras una declaración de independencia; algo que, por otra parte, el propio Mas reconoció recientemente en declaraciones al diario italiano La Repubblica. Roger Albinyana pareció confirmar este punto al reconocer ayer que la Generalitat no espera «una respuesta directa».

La Embajada de Estados Unidos en Madrid reafirmó ayer que la tradicional postura de EE. UU. en referencia a las pretensiones soberanistas del nacionalismo catalán no ha cambiado. El Gobierno de Barack Obama «no entra a valorar» este «asunto interno de España» al ser «competencia del Gobierno español», según declaraciones a Europa Press de la Embajada de Estados Unidos Madrid.