Guerra entre animalistas y la Urbana por la muerte de la perra

La muerte de la perra Sota a tiros en plena calle de Barcelona por parte de un agente de la Guardia Urbana sigue dando que hablar, y, de hecho, provocó una especie de guerra entre el cuerpo policial y los animalistas. Fue en defensa propia, señaló la Urbana.

La muerte de la perra Sota a tiros en plena calle de Barcelona por parte de un agente de la Guardia Urbana sigue dando que hablar, y, de hecho, provocó una especie de guerra entre el cuerpo policial y los animalistas. Fue en defensa propia, señaló la Urbana.

Por su parte, la entidad animalista Nova Eucària presentó ayer una denuncia en un juzgado de Barcelona contra el agente. Aseguraron, en un comunicado, que su equipo jurídico presentó una denuncia en la que adjuntan pruebas que consiguieron, y solicitan al juez la práctica de diligencias de pesquisa para proseguir con el procedimiento legal.

La entidad ve en la actuación omisión de auxilio, abuso de poder, uso de arma de fuego fuera de los estipulado por ley y uso indebido y desproporcionado de la fuerza.

Destacan que, si Sota hubiera sido una persona, «se consideraría de forma inmediata un acto de violencia con resultado de muerte, calificado penalmente como un delito de asesinato». También pidieron a los ciudadanos que eviten el sensacionalismo, y criticaron que algunas personas hayan mentido al afirmar que presenciaron los hechos: «Todo va en contra de la credibilidad y de las versiones que abogan por la defensa de Sota».

Fuentes de la entidad señalaron que siguen buscando más pruebas y que cuentan con un par de testigos oculares que no grabaron ni fotografiaron los hechos pero que aseguran que los presenciaron.

La alcaldesa, Ada Colau, pidió de nuevo pruebas documentales y testigos de los hechos, y explicó que por el momento no han recibido ninguno de los momentos previos al disparo que mató a la perra.

Por otra parte, el sindicato CSIF pidió a Colau que el Ayuntamiento se sume a la denuncia que prevé presentar o que interponga una propia contra lo que ve delitos de odio y discriminación hacia la Guardia Urbana y el agente.

En una carta dirigida a Colau, el sindicato asegura que acudirá al Fiscal de Odio y Discriminación, porque «la Guardia Urbana y el agente están siendo objeto de todo tipo de calumnias, injurias, insultos, vejaciones y amenazas de muerte», y pide al Ayuntamiento sumarse o interponer su propia denuncia para defender la honorabilidad del cuerpo.

En Twitter, la urbana defendió «la profesionalidad que demuestran sus agentes en los miles de servicios e intervenciones» que realizan diariamente, y rechazó cualquier tipo de violencia animal.

«Desde la @barcelona_GUB siempre hemos estado comprometidos con la protección y el bienestar animal y rechazamos cualquier tipo de insulto o amenaza a nuestro colectivo», señalaron. Añadieron que velarán por que la investigación que se está llevando a cabo se haga «de manera transparente y objetiva», en la línea de Colau.