Ilustrando a don Mendo

Hace cien años que levantaba el telón una de las obras más representadas del teatro español. «La venganza de don Mendo», de Pedro Muñoz Seca, sigue divirtiendo e invitando a la risa.

Hace cien años que levantaba el telón una de las obras más representadas del teatro español. «La venganza de don Mendo», de Pedro Muñoz Seca, sigue divirtiendo e invitando a la risa. Este clásico moderno del humor es ahora objeto de una nueva edición editada por Reino de Cordelia, preparada y prologada por Luis Alberto de Cuenca y enriquecida con ilustraciones de José Antonio Fernández, más conocido como Fer. Este último habló ayer con este diario sobre un reto que «me tenía asustado. ¿Mis dibujos al lado de las astracanadas de Muñoz Seca? Me costaba creer que este encargo no fuera una inocentada».

Fer le asustaba el hecho de enfrentarse a una obra que antes habían trabajado con su personal estilo dos dibujantes de peso: Enrique Herreros y Antonio Mingote. «Me acojoné. Así que cogí el texto y fui buscando la manera de poder hacerlo, trabajando a mano cada una de las ilustraciones», explicó el dibujante. Una vez tuvo concluido el trabajo se lo mostró a uno de los grandes del cómic: el dibujante Kim. «Él es mi maestro. Lo vio y le encantaron. Ahora me encanta que algunos digan que estos dibujos son “muñozsequianos”», comenta el dibujante con su personal humor.

Respetando el espíritu del mítico dramaturgo, Fer ha incluido no pocos guiños, como una pareja de guardias civiles en homenaje a su padre; su pueblo natal de Mansilla de las Mulas, en la provincia de León; o el popular gato de su amigo Jaume Perich. «Me lo he pasado muy bien y es que Muñoz Seca es muy divertido. Me he reído mucho leyendo la obra y eso que han pasado cien años desde que fue escrita. Es que tiene mucha gracia, aunque en ocasiones use un humor que, especialmente para algunas, puede parecer no muy adecuado para hoy. Pero tiene esa gracia de jugar con la lengua, de inventarse palabras. Hice la prueba de pasarle “La venganza de don Mendo” a gente que conozco y se enganchaban», subraya uno de los referentes del humor gráfico en nuestro país.

Para poder entrar en el mundo de «La venganza de don Mendo», Fer se ha informado de la vida y la obra de Muñoz Seca, desde sus éxitos teatrales pasando por el indagar en su asesinato durante la Guerra Civil en una de las sacas que tuvieron lugar en Paracuellos del Jarama. «Aguantó muy bien en la cárcel, incluso sin perder el humor. Es algo que me impresionó bastante. Lo que pasó en la guerra fue muy bestia en los dos bandos y sé de lo que hablo porque he estudiado mucho lo que sucedió en 1936», aclara el artista.

Fer tiene una la capacidad de dibujar rápido y con una maestría envidiable, algo que impresionó a Gin, uno de sus indiscutibles referentes. Mientras hablamos, en un sobre traza al gato de Perich en el Collioure donde murió Antonio Machado en 1939. «Todos los años visitó el cementerio en el que descansa Machado, mi poeta favorito. Siempre le llevo un dibujo que depositó en el buzón que hay junto a la tumba. A cambio, le robo una de las banderas republicanas que le dejan. Alguna vez le he robado dos banderas, pero imagino que doña Ana, su madre, le dice a Machado: “deja que se las lleve porque siempre te trae dibujos”», comenta divertido Fer. Rememorando al autor de «Campos de Castilla», el humorista comenta que le gustaría dibujar algo sobre él. Seguro que al poeta sevillano le gustaría.