Política

El desafío independentista

JxCat no prevé un plan D y flirtea con una nueva convocatoria electoral

La lista del ex president descarta otro candidato si el TS veta a Sánchez y se prepara para investir a distancia a Puigdemont.

JxCat no prevé un plan D y flirtea con una nueva convocatoria electoral
JxCat no prevé un plan D y flirtea con una nueva convocatoria electorallarazon

La lista del ex president descarta otro candidato si el TS veta a Sánchez y se prepara para investir a distancia a Puigdemont.

Este domingo Carles Puigdemont desvelará su estrategia. Lo hará en una entrevista que emitirá la Televisión Pública en «prime time». Según las fuentes consultadas por LA RAZÓN no habrá sorpresas. Puigdemont defenderá su derecho a ser elegido y propondrá mantener el pulso con el Estado, en paralelo a la «internacionalización del conflicto». La decisión del tribunal alemán de dejarlo en libertad y negar su entrega a España por rebelión «le ha vuelto a dar alas», dicen en su entorno. En este escenario, en el independentismo que aboga por la constitución de un nuevo gobierno efectivo se temen lo peor. «JxCat no pondrá un candidato encima de la mesa tal y como está acordado», dicen desde ERC. Un augurio que, Josep Costa, vicepresidente del Parlament por JxCat, se encargó de alimentar tras afirmar ayer que no está previsto proponer más candidatos a la investidura si el Tribunal Supremo mantiene el veto a Jordi Sánchez.

De ser así, sin plan D, la política catalana quedaría abocada a un bloqueo infinito, que desembocaría en una nueva convocatoria electoral –hay margen hasta el 22 de mayo para investir un president–. En este sentido, el núcleo duro de Puigdemont viene valorando, con mayor o menor intensidad, regresar a las urnas. Ahora, aprovechando la inyección de moral que supuso la decisión de los tribunales alemanes y el «eco internacional» que ha desencadenado, según consideran, es un planteamiento que vuelve a cobrar mucha fuerza.

Mientras, tras la sesión de investidura convocada para mañana con Jordi Sánchez como candidato, el plan de JxCat pasa por intentar la investidura a distancia de Puigdemont –el ex president sí contaría con los votos de la CUP–. Para ello se está preparando el terreno con la reforma de la Ley de Presidencia, con la que se pretende «legalizar» una investidura telemática. La idea con la que se trabaja desde JxCat es celebrar el mismo día un Pleno para dar luz verde a la modificación de la Ley y un Pleno para investir a Puigdemont. Así lograrían burlar la suspensión del Tribunal Constitucional, aunque es cierto que, el presidente del Parlament, Roger Torrent, es quien tiene la última palabra como responsable de convocar las sesiones parlamentarias. Para atar todos los cabos, Puigdemont ha convocado una reunión de su grupo parlamentario el lunes en Berlín. Seguramente irán todos los diputados, incluidos los miembros del PDeCAT, que miran con un cierto pavor sus nuevos movimientos, ya que impide la vuelta a la normalidad con un Govern que recupere las instituciones y levante la aplicación del 155, como ayer pidieron en un comunicado las confederaciones de UGT y CC OO.

Ésta es la opción preferida por ERC, que quiere que un nuevo gobierno marque una nueva hoja de ruta. Así se lo ha confirmado Oriol Junqueras a un dirigente político, que prefiere mantener el anonimato, tras visitarlo en la cárcel de Estremera. Junqueras considera que la única fórmula es la de constituir gobierno y abandonar movimientos unilaterales que se han mostrado fracasados.

En su partido, miran con escepticismo el futuro. Se da por descontado que mañana no habrá Pleno, pero empiezan a dar por descontado que Puigdemont volverá a erigirse en protagonista y el nuevo presidente catalán deberá esperar. De hecho, Puigdemont, con este movimiento que anunciará a bombo y platillo este domingo, se ahorra también las tensiones internas en el seno de JxCat para elegir un candidato. Desde el 21 de diciembre, JxCat ha propuesto a Carles Puigdemont, Jordi Turull, Jordi Sánchez, Marta Madrenas, Marc Solsona, Albert Batet, Ferran Mascarell, Miquel Buch, Quim Torra, Francesc de Dalmases, Elsa Artadi y Laura Borràs. Total 12 candidatos, que escenifican la desunión y la desconfianza de la coalición que preside Puigdemont.