El desafío independentista
La ANC logra 4.000 inscritos para arropar a Mas el 6-F
El conseller de Justicia anuncia que no se unirá al resto de los miembros del Govern en las protestas convocadas a las puertas de los tribunales
El conseller de Justicia anuncia que no se unirá al resto de los miembros del Govern en las protestas convocadas a las puertas de los tribunales.
El intento de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y del resto de entidades soberanistas de conseguir una movilización «excepcional» el próximo 6 de febrero, día en que dará inicio el juicio contra Artur Mas por la causa del 9-N, ya está dando sus frutos. Más de 4.000 personas ya se han inscrito para participar en una movilización que tendrá lugar a las puertas del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) o bien a las puertas de la Ciutat de la Justícia, ya que todavía no se ha determinado el lugar.
El TSJC juzgará del 6 al 10 de febrero próximos al ex presidente de la Generalitat Artur Mas y a las exconselleras Joana Ortega e Irene Rigau por desobedecer al Tribunal Constitucional (TC) al mantener la consulta independentista del 9-N. La ANC, Òmnium Cultural, la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) y la Asociación Catalana de Municipios (ACM) mostraron ayer su asombro por el elevado número de peticiones recibidas en tan sólo 24 horas, puesto que lanzaron la web de inscripciones «9nsomtots.cat» este mismo viernes.
Las entidades independentistas han convocado, bajo el lema «El 6 de febrero nos juzgan a todos», una concentración desean multitudinaria e incluso han animado a los ciudadanos a pedir fiesta en el trabajo para poder unirse a la protesta. Las organizaciones convocantes subrayan el carácter excepcional de la convocatoria e insisten en su petición de que los trabajadores que puedan disponer de un día libre para acudir a primera hora de la mañana a la manifestación.
La mayor parte de los consellers del Govern tiene pensado participar en esta concentración, tal y como hicieron cuando Mas fue a declarar al TSJC. Sin embargo, el conseller de Justicia, Carles Mundó, consciente del malestar que suscita entre los jueces la presión institucional, aseguró ayer, durante una entrevista en el programa «Converses» de la cadena Cope, que no se sumará. «Como conseller del ramo no me corresponde», asumió.
Mundó también se refirió a la la posibilidad de que la presidenta del Parlamento de Cataluña, Carme Forcadell, sea juzgada en los próximos meses, y comentó que el hecho de que “la presidenta de una cámara elegida democráticamente sea apartada del cargo por permitir que se pudiera hacer una votación relacionada con un posicionamiento político, muchos ciudadanos lo juzgarán como un hecho extremo y sumamente gravísimo». En esta línea, Mundó valoró muy negativamente que el Gobierno «en lugar de responder políticamente, responda con los tribunales».
En cuanto al futuro de la prisión Modelo de Barcelona, el conseller reiteró que si el centro se acaba cerrando antes de construir una nueva prisión «se mantendrán todos los puestos de trabajo» y no habrá despidos.
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