Asuntos sociales

La comida que se tira al año podría llenar 80 veces los bancos de alimentos

La organización lanza un SOS para reabastecer sus estanterías «vacías»

Los bancos de alimentos catalanes dan comida anualmente a 136.000 personas
Los bancos de alimentos catalanes dan comida anualmente a 136.000 personaslarazon

Aunque la crisis multiplica la solidaridad, tal y como se demostró en la campaña de «El gran recapte» organizada antes de Navidad por el Banc dels Aliments, la otra cara de la moneda es que cada vez son más las personas que tienen que recurrir a la beneficiencia para poder comer. De las 2.300 toneladas que se recogieron en la campaña de noviembre, que batió récords de fraternidad y solidaridad, apenas quedan unas pocas cajas en el almacén que el Banc dels Aliments tiene en la Zona Franca. Aprovechando el XVIII congreso de los 55 bancos de alimentos españoles, que estos días se celebra en Barcelona, el presidente del Banc dels Aliments, Antoni Sansalvadó, lanzó un SOS a empresas, entidades y particulares para que hagan donaciones, sobre todo, de productos de alto contenido calórico y nutritivo, como leche, alubias, conservas y aceite, que son fáciles de almacenar, para poder reponer las estanterías que «están casi vacías».

La imagen de las estanterías vacías resulta estremecedora tras conocerse que en España se despilfarran anualmente ocho millones de toneladas de comida, una cifra 80 veces superior a la cantidad de comida que reparte la red estatal de bancos de alimentos, que agrupa a 2.000 voluntarios y distribuye 104.000 toneladas de comida cada año a 1,3 millones de personas. El dato lo dio el presidente de la Federación Española de Bancos de Alimentos, José Antonio Busto, quien denunció que «es una paradoja intolerable que Europa tire la mitad de los alimentos que produce».

Entre las propuestas para evitar que la comida acabe en la basura que los bancos de alimentos proponen, se contempla eliminar las ofertas 2x1 en los supermercados y adaptar los envases a la estructura social actual, en la que cada vez más personas viven solas.

Sobre la propuesta del Gobierno para que los yogures dejen de tener fecha de caducidad y pasen a tener una de consumo preferentes, Busto señaló que «es una anécdota», tras señalar que «se utilizan unos coeficientes de seguridad más altos de los que corresponden».

La presidenta del Parlament, Núria de Gispert, pidió la colaboración de las empresas, tras destacar la importancia de la solidaridad familiar.