Puigdemont reclama unos Mossos al nivel de la Policía

Pide que participe en foros internacionales como recoge el Estatut.

Diez años después, Cataluña vuelve a tener la figura del «Mayor» como máximo responsable de los Mossos d’Esquadra. El actual comisario jefe de la policía catalana, Josep Lluís Trapero, tomó ayer posesión del cargo en un acto al que el Govern dotó de una fuerte carga política. Tanto en las formas, como en el contenido del discurso del president de la Generalitat, Carles Puigdemont, que no desaprovechó la ocasión para volver a reclamar que los Mossos participen en los mismos foros internacionales que la Policía Nacional. Además de Puigdemont, al acto no faltaron la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, la mayoría de los consellers y una nutrida representación de los cuerpos de seguridad, inclusive del Ejército y de la Policía Nacional, que tomó nota de las peticiones de Puigdemont.

El president de la Generalitat reclamó que los Mossos d’Esquadra puedan desarrollar las competencias que se recogen en el Estatut, que entre otras prevé que puedan acudir a foros internacionales de seguridad. «No es normal que la policía catalana no participe en los mismos foros que la policía española», lamentó Puigemont. Como tampoco «no es normal que no se haya reunido la Junta de Seguridad desde 2009», añadió. El president de la Generalitat alegó que la amenaza del terrorismo yihadista, los delitos electrónicos, vejaciones en las redes sociales o la violencia machista requieren que se tengan en cuenta sus demandas, porque al final a quien acaba perjudicando este rifirrafe más político que policial es al ciudadano.

Con discreción, Puigdemont intentó involucrar a la policía catalana en el proceso independentista cuando pidió a los Mossos d’Esquadra que ejerzan como «una policía europea, moderna y democrática al servicio de la sociedad a la que nos comprometimos y a la que nos continuaremos comprometiendo, tanto ahora como en el futuro que elijan los catalanes para este país».

Con la restitución del Mayor, Interior se dota de más independencia. El último Mayor, Joan Unió, se jubiló en 2007, y hasta la fecha el máximo rango policial lo ejercía el comisario jefe, el mismo Trapero. Aunque al puesto podían acceder el resto de comisarios, el director de la policía catalana, Albert Batlle, anunció que se asignaría a Trapero, decisión criticada por los sindicatos.