Un choque entre dos trenes de Cercanías en Sants provoca 22 heridos leves

BARCELONA- Un choque entre dos trenes de Cercanías en la estación de Sants de Barcelona provocó ayer contusiones y heridas leves a 22 pasajeros. La lesión más importante la sufrió un joven, que recibió un fuerte golpe en la cabeza y tuvo que ser derivado hasta el Hospital Clínic. Fue dado de alta pocas horas después. La mayoría de los perjududicados sufrieron contusiones en la cabeza, tras caer al suelo por culpa del impacto.

Renfe abrió una investigación para esclarecer los hechos, aunque los primeros indicios apuntan a que el maquinista no frenó a tiempo para evitar la colisión de ambos convoyes.

Fuentes del ente ferroviario confirmaron a LA RAZÓN la apertura de la investigación, pero no corroboraron del todo que el choque se debiera a este error humano de uno de los maquinistas. Este tipo de investigaciones suele alargarse durante días.

Las mismas fuentes añadieron que el maquinista dio negativo en la prueba de alcoholemia, que siempre se hace en estos casos, y que tiene tres años de experiencia. Se le abrió un expediente laboral, por lo que pierde temporalmente las habilitaciones para la conducción.

«Esta medida es un procedimiento habitual en este tipo de casos, y las habilitaciones pueden ser recuperadas una vez superadas una serie de requisitos y pruebas», señaló un portavoz de Renfe.

El accidente sucedió a las 10.05 horas. Un tren de la línea R1, que había salido de Calella a las 8.52 y que iba en dirección a L'Hospitalet, chocó por detrás a poca velocidad con un convoy de la R4, que estaba estacionado en la vía 7 y que iba a Martorell.

Latigazos cervicales

Una docena de pasajeros tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos que se desplazaron al sitio, la mayoría por latigazos cervicales y contusiones. Entre ellos estaba el conductor del tren que llegó por detrás. Algunos de los viajeros se quejaron por el accidente, pero las discusiones no pasaron a mayores.

A consecuencia del accidente, la circulación de trenes por las líneas de Cercanías R1, R3 y R4 resultó afectada. El servicio sufrió retrasos de entre quince minutos y media hora hasta que se pudieron retirar los dos convoyes de la vía, sobre las 18.00 horas. La operación fue realizada por técnicos de Renfe y Adif.

Los trenes que no podían circular por la vía 7 tuvieron que ser desviados por recorridos alternativos, mientras que los convoyes de la R1 se vieron forzados a iniciar o finalizar su trayecto en la estación de Francia.

A la estación de Sants se desplazaron varias dotaciones de los Mossos d'Esquadra, de la Guardia Urbana y tres ambulancias del Servicio de Emergencias Médicas. Renfe y Adif informaron del inidente por megafonía, pero la estación de Sants presentó durante toda la mañana un aspecto de normalidad y sin grandes aglomeraciones de pasajeros. Las colas para comprar billetes no alcanzaron una longitud fuera de lo habitual.

El director de Cercanías de Renfe en Cataluña, Miguel Pérez, afirmó que la maniobra realizada por el tren que venía por detrás tiene que ser autorizada por los técnicos encargados, por lo que «no entendió muy bien» lo que había ocurrido. Añadió que se trata de una operación habitual que consiste en permitir a un segundo convoy entrar en la vía para ahorrar tiempo y pararse detrás del que esté estacionado.

Impacto en el tren

Una pasajera que iba en uno de los convoyes explicó que «los usuarios estábamos de pie esperando para bajar cuando notamos un impacto, y se nos han caído los objetos que llevábamos en las manos». Otra usuaria, Doris Martínez, que iba en el tren que venía de Calella, señaló que el choque se produjo cuando el tren ya estaba a la altura del andén, y que la mayoría de pasajeros no iban sentados.

«Estábamos de pie para bajar, ya veíamos el andén, y justo cuando iba a parar el tren hemos sentido un golpe muy fuerte, la mayoría de los pasajeros se han golpeado al caer al suelo», explicó, antes de añadir que «las luces se apagaron, hemos visto humo y se abrieron las puertas».