Unió sitúa su congreso en abril con la expectativa de unas elecciones en marzo

El nuevo descalabro de Unió ha empujado automáticamente a la formación a fijar una fecha para acometer la renovación de su cúpula. El secretario general de la fuerza democristiana, Ramon Espadaler, anunció ayer, tras un comité de gobierno que analizó los resultados electorales, el calendario previsto para celebrar el consejo nacional y su congreso. El 16 de enero –una semana después de la fecha límite para que el haya investidura del president de la Generalitat– se llevaría a cabo el consejo nacional, y el 16 de abril, su congreso. Las fechas escogidas son estratégicas, con vistas a unas hipotéticas elecciones en marzo tras una probable falta de acuerdo entre Junts pel sí y la CUP. De esta manera, Unió optaría nuevamente a entrar en el Parlament y agotaría una oportunidad de resucitar a un partido hundido desde su separación de Convergencia. En caso de la celebración de estos comicios, Espadaler aclaró que la fecha del congreso podría ser alterada.

El líder del partido reconoció en la noche postelectoral su derrota personalmente: «Yo he perdido las elecciones». Duran i Lleida asumió la derrota y, a su juicio, no fueron capaces «de garantizar la utilidad del voto. Hemos perdido las elecciones». Además del reconocimiento de la derrota electoral, a nivel interno, el líder de UDC aludió al candidato en las elecciones del 27-S, Ramon Espadaler. «Fue mejor candidato que yo el 27-S y eso lo hemos de tener presente en el futuro», afirmó Duran. Unió solo alcanzó el 0,26% de los votos y quedó fuera del Congreso. De esta manera, invitó a pensar que el futuro de la dirección del partido podría pasar a manos del ex conseller de Interior de la Generalitat. Si bien, Duran puntualizó el domingo que no va a dimitir.

Así, pese a que las elecciones generales ratificaron su clara pérdida del electorado, Unió insiste en sus ideas. En la valoración que hizo Espadaler de los resultados electorales, defendió que su partido «ha sido derrotado en cuanto a presencia y votos, pero no por discurso e ideas». El secretario general de Unió sostuvo que el 20-D apuntaló la opción por el derecho a decidir, al que «algunos quisieron pasar pantalla con mucha celeridad», en alusión a CDC. Espadaler mantiene la convicción de que las elecciones generales demostraron que «existe un espacio para el catalanismo político no rupturista, centrado» y que Unió tiene el próposito de «estar ahí» cuando éste se reconstruya.

Unió atraviesa uno de los momentos más delicados de su historia, y la celebración de unos comicios en Cataluña en marzo podrían suponer una bomba de oxígeno. En lo referente a las comprometidas finanzas, Espadaler aseguró que se plantearán soluciones «con toda normalidad».