Cañizares asegura que ninguna religión fomenta ni alienta la violencia

El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, presidió ayer un acto interreligioso junto a los líderes musulmanes, judíos, hinduístas y budistas, además de representantes de diferentes confesiones cristianas, en el que coincidieron en mostrar las religiones como símbolo de paz y unión. En ese sentido, Cañizares recalcó que ningún credo, «fomenta ni alienta la violencia».

En la celebración, que coincidió con el Miércoles de Ceniza, Cañizares aseguró que Dios no divide ni enfrenta. «Dios une y da la paz y la religión no divide ni enfrenta y prueba de ello es esta unión en oración de esta tarde», recalcó en su introducción el purpurado al que los demás representantes de las distintas religiones y confesiones cristianas agradecieron el encuentro y la colaboración de todos los participantes.

Con la idea de resaltar el dolor que supone para la religión ver que la paz «esté rota y amenazada en Siria y otros muchos lugares de la Tierra», el arzobispo leyó una oración de San Francisco de Asís, y también citó la plegaria por la paz del papa Francisco en Israel en 2014. Asimismo, recordó que para conseguir la paz «se necesita mucho más valor que para hacer la guerra».

Tras esta introducción, el primer líder en intervenir fue el presidente de la Comisión Islámica de España, Riay Tatary, que recordó que la paz, «desde la perspectiva islámica, es la ausencia de enfrentamiento», para posteriormente añadir que el Profeta hablaba para la convivencia entre todos los pueblos.

Tras un minuto de música y otro de silencio para la oración, intervinieron el rabino Moisés Bendahan, que habló en nombre de la Federación de Comunidades Judías de España, Paloma Alba, en representación de la Federación Española de Comunidades Budistas y finalmente, el representante del hinduismo Rameshwarananda Giri, de la Orden de los Swamis.

El acto finalizó con la reiteración de Cañizares de que las religiones, en cualquier caso, «no dividen, sino que unen».