Vuelve la fiesta de la economía tras cinco años de crisis

El ministro del ramo, Luis de Guindos, asegura que el modelo de crecimiento de la región es el que debe seguir el resto de España

Cinco años después, la Noche de la Economía valenciana volvió a celebrarse reuniendo ayer a más de 700 empresarios en la Lonja de Valencia, símbolo del comercio de la ciudad. En esta ocasión no hubo premiados, puesto que el acto, organizado por la Cámara de Comercio, quería constituir un homenaje a la empresa valenciana por haber sido capaz de salir incluso reforzada de una de las peores crisis de la historia.

Las cifras así lo indican, de hecho, el ministro de Economía, Luis de Guindos, uno de los invitados de honor al acto, aseguró que los datos sitúan a la Comunitat como ejemplo de modelo de crecimiento a seguir por el resto de España. Con respecto a la situación económica del país, se mostró mucho más que optimista, y aseguró que el «tirón» de España durante los próximos cuatro años se situará en torno al siete por ciento de crecimiento. Recordó además que en este momento el país ya crece el doble que la Unión Europea.

A pesar del halago del ministro, el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, no reparó en denunciar la discriminación que sufre la Comunitat debido al injusto sistema de financiación autonómica y aseguró que «para desarrollar todo su potencial, la Comunitat tiene que ser tratada con equidad e igualdad».

Exigió además el pago de la deuda histórica producida por esta infrafinanciación y exigió que este modelo se modifique de forma inmediata, puesto que el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) es «solo un crédito más que aumentará la deuda de la Comunitat». Puig, a quien un empresario le instó a hablar en castellano cuando solo había pronunciado dos frases en valenciano, «para que el ministro lo entendiera», aseguró también que hará todo lo que esté en su mano para dar seguridad a las empresas.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, el anfitrión, José Vicente Morata, exigió que todas las fuerzas políticas aspiren a un «mercado único español». Además, indicó que consideran «imprescindible y exigible» la calidad institucional, necesaria para la gobernanza, y que tiene que ver también con un «marco de financiación que permita a todas las comunidades autónomas prestar los servicios que requieren sus ciudadanos».

Morata rechazó asimismo las «propuestas antisistema que deambulan por toda Europa y España, fruto de la crudeza de la crisis» e indicó que estas «no pueden ni deben condicionar la adecuada gobernanza». Exigió normas claras para las empresas, «justas y exigibles en una sociedad del bienestar que forma parte de nuestra cultura».